diciembre 2021 - Página 2 de 2 - Mi Negocio Veterinario
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El tambo es uno de los negocios más dinámicos del sector y eso representa un desafío para la gestión. Compartimos algunos puntos clave para gestionar eficientemente un establecimiento que cuenta con producción de leche.

En el sector agropecuario, una de las tareas más difíciles es ordenar los números. Muchos productores intentan hacerlo y no logran los resultados esperados. Sin embargo, asignar tiempo a esta práctica es fundamental para el futuro del agro.

Para la gestión en un establecimiento, siempre hay que analizar cada unidad de negocio con la que se cuenta y luego adoptar el gerenciamiento por separado. En esta artículo se abordan variables determinantes para el resultado del tambo.

En primer lugar, es necesario aclarar que el tambo es uno de los negocios más dinámicos del sector y eso hace que requiera una gestión prácticamente al día, determinando el margen bruto por litro producido al cierre de cada mes. 

Para gestionar eficientemente un establecimiento que cuenta con producción de leche existen algunos puntos claves, que compartimos a continuación:

  1. Producción de litros: Es la herramienta principal del negocio. Nos sirve para lograr una buena facturación y solventar los gastos fijos. Es clave en estos casos tener un objetivo de producción para saber si estoy en umbrales apropiados según mi modelo productivo 
  2. Gastos operativos: estos pueden ser los costos por suplementación, personal, productos veterinarios/sanidad, mantenimiento de equipos de ordeñe, entre otros. Es vital hacer un monitoreo de ellos ya que forman parte del costo total.
  3. Eficiencia de conversión: Aquí se compara a la cantidad de litros de leche producidos con los kilogramos de materia seca consumidos por las vacas durante la producción. Aquí también debo entender cuál es el rango deseable según mi modelo de producción (con tendencia pastoril o suplementación)
  4. Porcentaje adicional al ingreso de leche que aportan los ingresos de carne: En el tambo se genera un ingreso adicional que está relacionado a la producción de carne. Esto se da en primer lugar a partir de la venta de vacas rechazo (terminaron su ciclo productivo). En segundo plano, se da la venta de terneros, novillitos o novillos (varía según hasta dónde se llegó con la recría) ya que las hembras van a ordeñe y los machos se venden como carne. Otro hecho que hace a ese porcentaje adicional es la venta de las vaquillonas preñadas, la cual se realiza en los establecimientos que cuentan con un cierto límite de ordeñe por espacio, instalaciones y personal. Por último, se destaca el posible crecimiento del rodeo total, que en caso de darse, marcaría una diferencia en el inventario entre el inicio y cierre de la gestión.

Fuente: Grupo Cencerro
info@grupocencerro.com

Morante. Un referente en el campo oficial.

Morante. Un referente en el campo oficial.

Marcelo Morante es profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de La Plata y coordinador del Programa Nacional de Investigación de los usos medicinales del Cannabis, del Ministerio de Salud de la Nación.

“Los cambios primero se legitiman en la sociedad y después se legislan, esa es la secuencia del cannabis en el mundo y sigue el mismo camino en Argentina. Primero fueron las mamás con sus niños y ahora son los veterinarios organizados los que van a lograr que el marco regulatorio los contemple como actores fundamentales que son en este tema”, explicó el profesional. Y agregó: “Ese paso Argentina lo va a dar en un tiempo no muy lejano: si no es por la vía de la Ley 27.350 será el próximo marco regulatorio en que los pueda contener. No creo que pase mucho tiempo hasta que sean incorporados a la legislación”.

LEÉ EL INFORME COMPLETO REALIZADO POR MOTIVAR SOBRE ESTE TEMA
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Además, Morante agregó: “Los tutores ya han decidido que sus mascotas reciban este tipo de productos. Es una cuestión de tiempo y de tener el marco regulatorio adecuado para que se desarrollen productos de grado y de calidad a los que los veterinarios puedan acceder”.
Consultado por MOTIVAR en cuanto al avance de la industria farmacéutica en el tema, recordó que en nuestro país ya hay un producto a base de Cannabis registrado y aprobado para su uso en humanos, el Convupidiol, del laboratorio Alef Medical Argentina. “Esperamos que ningún actor quede fuera, ni los laboratorios, ni quienes hacen cultivos controlados con analítica en las universidades”, explicó el referente, asegurando que para que avance la industria farmacéutica (inicialmente en el área humana) hace falta avanzar el desarrollo de una materia prima que cumpla con los parámetros adecuados.

*Esta nota fue publicada en la edición Nº 227 de MOTIVAR

Somos nuestro principal activo y capital humano: cuidemos nuestra salud física y emocional; los pacientes y el mundo nos necesitan sanos y felices. ¿Cómo hacerlo? Aquí, algunas recomendaciones.

Cecilia Henríquez Coronado
Revolutionvet. Francia

Como médicos veterinarios, nos preocupamos de la salud de nuestros pacientes, sus familias y el medioambiente, pero muchas veces olvidamos la nuestra. Las largas horas de trabajo, las urgencias, el cliente que llega sin cita, la cirugía que se complica… ¡y nos quedamos sin almorzar, comer o merendar!
Muchas veces el exceso de trabajo (en especial ahora en periodo de “covidialidad”), la vida de familia, la formación continua, el transporte, etc., nos impiden preocuparnos de nosotros mismos. Es importante que recuerden que la “salud y bienestar” son fundamentales para poder entregar lo mejor de nosotros como médicos veterinarios.
Si no nos alimentamos o dormimos bien, nuestro cerebro y cuerpo, no reaccionan de forma óptima y además de correr el riesgo de cometer errores o ser más lentos, corremos el riesgo de enfermarnos y no poder seguir trabajando en lo que tanto amamos.
Por experiencia propia quiero darte algunos consejos:

  • Comiencen el día con una actitud positiva (vetittud) y sintiéndose con el poder de salvar y mejorar vidas animales y de personas.
  • Practiquen meditación y ejercicios de respiración; solo necesitan 5 a 10 minutos diarios para empezar el día con un mejor neuro-bienestar.
  • Coman sano, equilibrado y en calma. Prefieran las frutas, verduras y frutos secos antes que la comida chatarra o no comer. Coman un puñado de almendras más yogurt o comida casera preparada el día anterior (si es necesario), en vez de pasar horas y horas exigiendo a tu cuerpo y exponiéndolo a enfermedades.
  • Hagan ejercicio: si no pueden ir al gimnasio o practicar deportes, caminen 30 minutos al día, bailar 10 minutos en sus casas, ir en bicicleta o en rollers al trabajo, hacer sentadillas 15/día y ejercicios simples de estiramiento o relajación entre cada consulta. Cuiden su espalda y manos y aprendan a hacer movimientos adecuados para no dañar sus columnas.
  • Tomen agua, tisanas frías o calientes, té verde, guaraná o mate: en vez de gaseosas y mantengan una botella o termo en tu consulta, para poder hidratarse adecuadamente en las pausas.
  • Dediquen tiempo a pasatiempos, hagan actividades recreativas o creativas, ¡no todo es trabajo, también hay que divertirse y relajarse!
  • Trabajen en ambientes saludables donde se sientan escuchados, apoyados y valorados. No acepten maltratos psicológicos, ni malos tratos de parte de jefes, compañeros, ni clientes. ¡No normalicen empleos que afecten la salud mental!
  • Hablen para desahogarse luego de un caso difícil, lloren si lo necesitan luego de una eutanasia, pidan ayuda si sienten que llevan una carga emocional fuerte. Ser médico veterinario no es fácil, enfrentamos el dolor, el sufrimiento, la vida y muerte y a veces, es necesario reconocerse vulnerable, humano y extender la mano para levantar a alguien, para que te levanten o simplemente para abrazarse.
  • Tomen vacaciones, todas las personas que trabajan necesitan y merecen vacaciones para renovar energías, disfrutar del tiempo libre y descansar. La acumulación de cansancio genera problemas de salud a mediano y largo plazo. ¡Desconéctate, primero eres persona y luego eres médico veterinario!
  • Aprendan a segmentar clientes y trabajar con los “ideales”. Eviten clientes complicados, irresponsables e irrespetuosos. Tienen el poder de elegir con quién trabajar. Eviten pasar malos ratos, malos tratos y hasta difamaciones injustas.
  • No se auto-exploten, ¡ser trabajólico no te hace mejor profesional!. Tampoco necesitamos trabajar más para ganar más dinero, lo que necesitas aprender es a trabajar mejor (menos y de forma estratégica) y a ser más rentable y lograr un equilibrio entre tu vida laboral y personal/familiar.
  • Duerman lo que sus cuerpos les pide, Si están cansados haz una micro-siesta de 10 – 15 minutos bien cronometrados, en vez de saturarte de café o sobre-exigirte.
  • Agradezacan al final del día, evalúa lo que aprendiste, los desafíos que superaste (vetsiliencia), valora lo que hiciste por tus pacientes y sus familias y siéntete orgulloso del valioso rol que cumples a diario cómo médico veterinario.

Somos nuestro principal activo y capital humano: cuidemos nuestra salud física y emocional; los pacientes y el mundo nos necesitan sanos y felices.

*La Dra. Cecilia Henríquez Coronado, MV, MSc, es asesora, docente, conferencista en E-salud Animal, Telemedicina, Inteligencia artificial, Innovación, Gestión y Marketing.

Betancurt. “Hablar de Cannabis medicinal es hablar de Ciencia”.

Betancurt. “Hablar de Cannabis medicinal es hablar de Ciencia”.

El MV John Betancurt es el director científico de Vetcann y desde Colombia nos cuenta los principales avances de estas terapias en los animales. ¿Qué tienen que saber los veterinarios? ¿Y los laboratorios?

Luciano Aba
@aba_luciano
luciano@motivar.com.ar

Guadalupe Varelli
guadalupe@motivar.com.ar

El Cannabis medicinal abre una nueva ventana, una gran oportunidad para abordar diversas patologías en los animales. Esto no implica ignorar los tratamientos alopáticos que conocemos. No se trata de competir, sino de sumar entre todos en favor de la salud de los pacientes”. Así de concreto fue el MV colombiano John Betancurt, director científico de la Red de Cannabis Medicinal Veterinaria (Vetcann).

Dejando en claro que “estamos hablando de Ciencia”, el también Máster en Agroecología y Desarrollo Sustentable, nos ayudó a comprender la situación actual y el desarrollo de estas terapias en la región y el mundo.
“Sea cual fuere su uso, Cannabis Sativa L es la única especie de Cannabis y cuenta con 126 compuestos (APIs) que pueden tener, de manera individual, potenciales farmacéuticos más que interesantes”, avanzó Betancurt en una entrevista que pueden ver completa (en video) con solo escanear el Código QR que completa este artículo o bien ingresando en el Canal www.youtube.com.ar.
“Ya entre los años 1800 y 1930, la planta del Cannabis era legal y muy utilizada en caballos, vacas y otros rumiantes. Había productos, de laboratorios que aún existen, que se empleaban en casos de cólicos, diarreas, inflamaciones, problemas gastrointestinales y para aumentar el consumo de alimento”, aseguró el investigador y consultor.
Sin embargo y a partir de las prohibiciones que se establecieron en 1930 en el marco de lo que se denominó la lucha contra las drogas, durante más de 100 años el cannabis pasó a ser ilegal. “Cuando hace algunas décadas se volvió a regularizar su situación en determinados países, se retomaron las investigaciones. Si bien esto se dio principalmente en medicina humana, en veterinaria se evolucionó, sabiendo hoy dónde están los receptores cannabinoides en los perros, por ejemplo”, aseguró Betancurt. Y reforzó: “Al Cannabis siempre le exigimos más por todos los estigmas que lo rodean, pero hay moléculas como la Dipirona, que usamos todo el tiempo en nuestra actividad, sobre la cual todavía no leí ningún estudio en modelos animales”.

En primera persona

John Betancurt es paciente epiléptico desde su nacimiento y en 2001 fue diagnosticado con epilepsia refractaria.
Luego de fracasar con cocteles de químicos -y sus efectos secundarios a cuesta-, decidió una segunda opción, vinculada con el Cannabis medicinal, la cual le permitió evitar cirugías y más medicamentos alopáticos. “Fue el puntapié para comenzar a investigar plantas de uso legal. Como veterinario necesitaba pasar ese conocimiento a mis pacientes animales”, explicó. Y remarcó: “Así empezamos con la ONG familiar Conciencia Verde, que surge y avanza con un enfoque médico, científico y el abordaje individualizado de los pacientes junto a su familia”.
Además, y desde hace casi 5 años, cuando se reglamentó el uso del Cannabis medicinal en Colombia, Betancur avanzó con la Red Cannabis Medicinal Veterinaria que hoy está presente también en México, Brasil, Chile y Australia. Disponible en www.vetcann.org, la entidad cuenta con su revista Remevet, en la cual se publican distintos trabajos locales a cargo de referentes en el tema.
“Una de nuestras misiones es acercar el mundo del Cannabis medicinal a toda la comunidad profesional; no solo a los que ya tienen la vocación de aceptarlo sino a quienes aún mantienen prejuicios o consideran que no es una medicina”, agregó Betancurt, para luego invitarnos a participar del tercer congreso internacional de Cannabis Medicinal en Animales: “Vetcann On Line 2021”, que se realiza del 15 al 21 de noviembre.

¿Es legal?

En la actualidad, son 52 los países que tienen regularizado el tema, pero en distintas etapas. Por ejemplo, el CBD -siendo un cannabinoide- se ha manejado de manera lícita como suplemento alimenticio en los Estados Unidos y distintos países de Europa. En nuestra región, Uruguay cuenta desde hace años con un marco regulatorio y también en México ya los veterinarios se encuentran recetando estas terapias de manera legal.
En el caso de Colombia, tiene la legislación más moderna y tiene algunos aspectos centrales: 1) desde el primer momento señala que médicos humanos y veterinarios pueden prescribir cannabis a sus pacientes, 2) contempla que el cáñamo es de categoría industrial y 3) al ser considerado el THC como cannabis medicinal, hay legislación, licencias de investigación y aprobación para sacar productos altos en este fitocannabinoide.

LEÉ LA ENTREVISTA CON MARCELO MORANTE DEL MINISTERIO DE SALUD
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En Argentina, la Ley Nº 27.350 manifiesta que toda la reglamentación ligada al Cannabis de uso medicinal está destinada a “investigar los fines terapéuticos y científicos de la planta de cannabis y sus derivados en la terapéutica humana”. Los animales no humanos no son tenidos en cuenta en esta Ley, ni en sus decretos reglamentarios o resoluciones posteriores.
Frente a esto, MOTIVAR tomó contacto con Marcelo Morante, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de La Plata y coordinador del Programa Nacional de Investigación de los usos medicinales del Cannabis, del Ministerio de Salud de la Nación.
“Los cambios primero se legitiman en la sociedad y después se legislan. Ahora son los veterinarios organizados los que van a lograr que el marco regulatorio los contemple como actores fundamentales que son en este tema”, explicó el profesional que estuviera presente en la Expo Cannabis 2021 realizada en La Rural de Palermo (Ver recuadro).

LEÉ MÁS SOBRE LA PARTICIPACIÓN DE LOS VETERINARIOS EN EXPO CANNABIS 2021
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Allí también se hicieron presentes representantes de Veterinarios Cannábicos Argentinos, quienes tuvieron una activa participación, no solo en la promoción del tema, sino también dando charlas a los asistentes (Ver recuadro).

¿Qué se sabe en Veterinaria?

Si bien todos los detalles sobre este tema están disponibles en la entrevista completa que realizamos con John Betancurt, vale aquí destacar cómo el Cannabis medicinal se vincula con casos de enfermedades neurodegenerativas o aquellas relacionadas con el sistema neurológico, como la epilepsia.
“Claramente se ha estudiado el efecto paliativo en animales que están en una etapa terminal o con un pronóstico de cáncer desfavorable, no como cura, sino para mantener el bienestar de ese animal”, reforzó Betancurt abriéndonos la puerta para sumar a este informe al MV Marcelo Zysman (SIAVet), en la búsqueda de profundizar sobre estas temáticas.

LEÉ LA OPINIÓN DE MARCELO ZYSMAN
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Más allá de esto, también se conoce el potencial del CBD ante inflamaciones y su acción en algunas enfermedades autoinmunes como artrosis.
“El mejor de los escenarios para los veterinarios y para los pacientes es tener productos de línea farmacéutica, seguros y trazables. No es igual un cannabis que otro”, reforzó el MV John Betancurt, dejando en claro que, en los distintos países, y dependiendo el momento, existen baches legales y riesgos.
“La preocupación es no perder su poder de prescripción de este tipo de medicinas y dejarla en manos de alguien que produce “plantas bonitas”. Todos estos tratamientos deben estar a cargo de un profesional de la salud. En el caso de los animales debe ser un veterinario”, insiste Betancurt.
“Es clave poder dar una opción terapéutica a los pacientes, pero siempre en el marco de la bioética. Si tenemos acceso a aceites, debemos procurar que sean trazables y lo más cercanos posibles a la calidad de una línea farmacéutica. No solo debemos considerar de dónde viene el producto y el modo en que se cultiva, sino también exigir análisis y datos de su composición. No se trata de dar “unas gotitas”, sino de establecer la concentración y miligramos necesarios para abordar una determinada patología en base al peso y las condiciones de cada paciente”, nos ilustró Betancurt.
Y subrayó: “Hay que hablar del Cannabis como de cualquier otra medicina”.

El THC y su impacto en los animales

“Al igual que el resto de los 125 fitocannabinoides, el THC tiene un potencial terapéutico enorme. Pero claro, hablamos de un componente muy controvertido de la planta, perseguido y satanizado desde los 70”, sostiene nuestro entrevistado, indicando que incluso dentro de la industria veterinaria hay resistencia al tema. De allí la relevancia de los estudios realizados en Colombia y otros países de manera legal, donde se estableció que el THC es altamente potente, el equivalente, por ejemplo, a 10 veces el CBD.
“La dosis hace al veneno y lo mismo aplica en este caso. No nos asustan los opioides, ni los anestésicos, pero el Cannabis sí… En el caso del THC y con dosis muy bajas, podemos hacer que el paciente no tenga algunos efectos adversos de la quimioterápica”, ejemplificó.
“Sabemos que hay un sistema cannabinoide que está en todos los animales, sabemos dónde están los receptores y que los CB1 están más estimulados por el THC. Ya hay estudios y casos de la seguridad del producto. Por ejemplo, como broncodilatador en asma felina y donde con bajas cantidades y a veces nebulizados logramos efectos. ¿Por qué descartarlo si puede funcionar?”.

¿Para cuándo los productos farmacéuticos veterinarios?

A medida que la legislación avanza, en los distintos países comienzan a percibirse situaciones similares, con la aparición de productos artesanales o frascos que de manera ilegal llegan a manos de los tutores de los pacientes, importaciones poco claras y productos legales que buscan salir al mercado.
En Colombia ya son legales en línea humana dos productos, uno de una empresa local y otro importado.
Mientras que en el rubro veterinario se espera para 2022 tener aprobado un producto de línea magistral (con las licencias tanto de los Ministerios del Interior y Salud, como también del ICA) y algunos cosméticos de línea veterinaria totalmente legal. “En el corto plazo también esperamos tener productos farmacéuticos a base de Cannabis registrados en líneas específicas por especie animal, seguramente con el tratamiento del dolor en el centro de la escena, así como el caso de enfermedades neurodegenerativas como la epilepsia y generando novedades en base a la casuística de casos que se vive en las clínicas veterinarias a diario”, nos adelantó Betancurt.
Finalmente, nuestro entrevistado dejó en claro que el futuro del Cannabis medicinal en veterinaria depende en gran medida de que su prescripción quede exclusivamente a cargo de los médicos veterinarios. “Tenemos que unirnos los investigadores, la Academia, el Estado, los pacientes y la industria para avanzar. Si no, vamos a estar girando en círculos permanentemente”, concluyó.

*Esta nota fue publicada en la edición Nº 227 de MOTIVAR

Por hechos ocurridos en diferentes encuentros ecuestres, entidades vinculadas a la profesión veterinaria emitieron un comunicado llamando a las autoridades a tomar cartas en el asunto.

En un mundo donde el concepto de Una Salud intenta velar por la sanidad de los animales humanos, los no humanos y la preservación del medio ambiente, el respeto por el bienestar de los animales es ya un hecho concreto que no admite discusiones. Con esta premisa en mente, profesionales de las Ciencias Veterinarias manifestaron su preocupación ante las graves faltas al respeto al bienestar de la especie equina en distintas actividades que tienen como protagonistas a diferentes razas, exigiéndoles un desempeño que perjudica su salud y calidad de vida.

“Debe reconocerse que el mundo ha evolucionado. Actividades y costumbres antes aceptadas deben inexorablemente ser replanteadas, adecuándose a las nuevas normas éticas y legales vigentes”, aseguran los referentes de las entidades que emitieron el comunicado: Federación Veterinaria Argentina (FeVA); Federación de Colegios y Consejos de la República Argentina (FECOVET); Sociedad de Medicina Veterinaria (Someve); Consejo Profesional de Médicos Veterinarios; Asociación Argentina de Veterinaria Equina (AAVE); Asociación Argentina de Bienestar Animal; la Academia Argentina de Agronomía y Veterinaria, la Cámara de la Industria Nacional Equina (CAMINE); Cámara de Laboratorios Argentinos Medicinales Veterinarios (Clamevet) y la Asociación Propietarios de Caballos de Carrera.

Pedido de acción

El documento destaca los miles de fuentes de empleo que genera la industria hípica de manera directa e indirecta a nivel nacional, pero pone el foco en que todas las actividades se desarrollen con el adecuado cuidado de los animales, su correcta alimentación, manejo, alojamiento y por, sobre todo, contar con un plan sanitario acorde, utilizando productos veterinarios registrados e indicados por el médico veterinario actuante.

“Solicitamos a las autoridades nacionales, provinciales y municipales involucradas con las actividades ecuestres que cumplan el rol que les compete, sea legislando, habilitando y/o controlando con responsabilidad todos los eventos ecuestres”, asegura el documento. Y completa: “La profesión veterinaria desde hace tiempo brega por la aprobación y puesta en vigencia de un protocolo para los eventos ecuestres con requisitos pre-competencia, donde la presencia del profesional veterinario debe ser una exigencia para garantizar la salud y el bienestar de los animales participantes, claro ejemplo de la viabilidad de este modelo es lo que sucede hoy en Santiago del Estero”.

Finalmente, la carta rubricada por las mencionadas entidades concluye: “Consideramos que se asigne a quienes tienen equinos a su cargo el rol de tenedores responsables, encuadrándose en lo dispuesto en la resolución 617/05 referida al programa de control y erradicación de enfermedades equinas y su reglamento de control sanitario, ya que en ella está contemplado y es menester hacerlo cumplir rigurosamente, permitiendo de este modo seguir con la actividad hípica la que con nobleza puede ser desarrollada cumpliendo con todos los estándares de bienestar animal”.

Son sustancias químicas que liberadas al ambiente actúan como mensajes que ayudan a organizar y dar estabilidad a la vida de los gatos. Es una forma de comunicación entre individuos de la misma especie.

Dr. Rubén Gatti
M.V. EMF(*). Director del Centro de Medicina Felina Buenos Aires.
Director de los Posgrados 1 y 2 de Medicina Felina de Vetes Web.

Las feromonas son sustancias químicas que liberadas al ambiente actúan como mensajes que ayudan a organizar y dar estabilidad a la vida de los gatos. Es una forma de comunicación entre individuos de la misma especie.
Estas sustancias químicas (principalmente ácidos grasos) se producen en diversas glándulas sebáceas y sudoriparas de distintas zonas de la piel y otros órganos del gato.
Las diferentes feromonas cumplen importantes funciones en la vida de los gatos como las que se detallan en el artículo completo al que podés acceder desde este link.

Indicaciones para la utilización de las feromonas felinas

  • Situaciones frustrantes de un ambiente monótono donde los gatos no puede desarrollar su comportamiento específico.
  • Situaciones de conflicto con otros gatos del ambiente.
  • Presencia de personas extrañas a las habituales.
  • Llegada de un nuevo gato, otro animal o un bebé humano.
  • Cambio de territorio ya sea permanente o momentáneo.

Todas estas situaciones pueden desencadenar varios tipos de comportamientos anormales, como un aumento de la marcación con orina en aerosol o con arañado de muebles, agresiones, aumento del tiempo de esconderse, disminución del juego, del consumo de alimento, etc.
Las feromonas pueden ayudar a bajar el estrés y evitar ese comportamiento natural pero inconveniente para sus propietarios.

Enfermedades con alto componente de estrés

Hay un grupo de enfermedades donde se ha observado que el estrés crónico puede ser una causa importante en su desarrollo, y la utilización de feromonas puede hacer el ambiente más confortable para estos gatos.
Las siguientes patologías son ejemplo de este tipo de enfermedades: Cistitis intersticial felina; obesidad; dermatitis sicógena o por exceso de lamido; herpesvirus felino y enfermedades crónicas.

Utilización profesional de las feromonas en el manejo amigable del gato

El concepto del manejo amigable del gato surge de que debemos hacer todo lo posible para que llegue lo más relajado posible al consultorio.
Esto es necesario para que nos permita la revisación clínica y todas las maniobras que necesitemos realizar para hacer un diagnóstico y tratamiento de su enfermedad.
La consulta del gato comienza en la casa del gato. La introducción en la jaula de viaje es el primer problema a enfrentar, por lo cual es necesario rociar con feromonas la jaula para favorecer la introducción y el viaje.
En la sala de espera de la veterinaria, es conveniente poner un difusor de las feromonas, además de otras indicaciones importantes como que no haya perros. También ayuda que haya mesas para las jaulas de viaje de los gatos.
En el consultorio, también es necesario tener un difusor prendido y ,además, rociar la ropa y manos del veterinario y otros elementos donde se apoyaría el gato, como la balanza, por ejemplo.
Por supuesto esto hay que hacerlo antes de que entre el gato en el consultorio. Si el gato va a ser internado, también es fundamental que tenga un difusor de feromonas.

Conclusiones

Los gatos no suelen expresar su ansiedad en forma notoria, por lo cual se producen situaciones de ansiedad crónica, que pasan desapercibidas si no se aprende a leer el comportamiento del gato.
Estos casos de ansiedad crónica suelen terminar en distinto tipos de alteraciones de comportamiento y en enfermedades concretas, que tendrían que ser la señal de alarma para los veterinarios para darse cuenta de que ese gato está sufriendo esa situación.
Las feromonas F3 y Maternales nos van a ayudan a mejorar esos cuadros clínicos, a veces por sí solas y otras veces serán el complemento de otras medicaciones indicadas para cada patología. En definitiva, solo tratemos de que nuestro paciente felino tenga la mejor calidad de vida posible.

 

Transmitir correctamente esta información es clave en la relación que se establece con los clientes actuales o potenciales. En este artículo encontrarás algunos consejos para hacerlo con eficacia.

Escribe José Luis Villaluenga Besaya
Docente del Posgrado de Gestión y Marketing Veterinario en VetesWeb
jlvillaluenga@rentabilidadveterinaria.es

En nuestras clínicas veterinarias ofrecemos y vendemos a nuestros clientes dos tipos de bienes: servicios y productos. Una prueba diagnóstica, una cirugía, una limpieza de boca o una consulta son ejemplos de servicios.
Un saco de alimentación balanceada, un collar antiparasitario, una pipeta, un arnés o un transporte son ejemplos de productos (Ver Cuadro N° 1).
Los servicios son intangibles, necesitan de personas para administrarlos, siguen un proceso o procedimiento de aplicación con los clientes por lo que, psicológicamente, el precio no suele ser el factor decisor sino todo lo que lo rodea: procedimiento que explica cómo se da ese servicio, persona que lo realiza, valor añadido, diferenciación.
Hay algunas situaciones que vivimos de forma cotidiana en nuestros consultorios que implican informar un precio. Los clientes se acercan hasta la clínica o llaman por teléfono para consultar cuánto cuesta una consulta, la castración de un gato o una perra, una limpieza de boca.
También se acercan hasta la clínica clientes nuevos con las mismas consultas.
Es habitual que al dar el presupuesto de un servicio a un nuevo cliente o a un cliente activo en nuestra clínica nos respondan que somos más caros que tal otra clínica veterinaria o nos pidan que bajemos el precio porque les parece caro.
A continuación, compartimos una guía de cómo manejar estas situaciones ya sea telefónicamente o de forma presencial en nuestra clínica.

Llamadas telefónicas

Es importante diferenciar entre clientes activos y potenciales.
Cuando llama un cliente que ya conocemos y ha contratado servicios con anterioridad, lo primero que tenemos que hacer es intentar que venga personalmente a la clínica para que le expliquemos en qué consiste aquello por lo que consulta. Si no logramos esa visita, recomiendo seguir estos cinco pasos:

  1. Explicar detalladamente el procedimiento clínico del servicio.
  2. Preguntar si tiene alguna duda al respecto.
  3. Dar el precio.
  4. “Técnica del silencio”: esperar 10 segundos a la respuesta del cliente.
  5. Actuar en consecuencia. Si la respuesta es positiva, dar cita para el servicio. Si hay objeciones, tratar de rebatirlas y cerrar la cita. Si no, dejar la puerta abierta para más adelante (en una visita física a nuestra clínica).

Cuando se trata de personas que aún no son clientes, mi recomendación es nunca dar el precio de un servicio veterinario de nuestra clínica. La única excepción son las consultas de urgencias en las que, tanto a clientes como a no clientes, hay que decir claro el precio orientativo de la consulta y los procedimientos médicos que necesiten ser realizados.
Tenemos que intentar que la persona interesada venga a nuestra clínica dándole una cita para consulta, que en este caso será gratuita. A su llegada, algún veterinario del equipo le atenderá y explicará. Es conveniente guardar de 5 a 10 minutos para este tipo de consultas, en caso de ser habituales.
¿Por qué? Porque el cliente que llama a una clínica solicitando precio de un servicio veterinario, probablemente llame a varias clínicas y elija el más económico. Puede ser un cliente o un “cliente misterioso” que quiere conocer nuestros precios, como un consultor veterinario o un veterinario competidor.

Visitas físicas a la clínica

Cuando se trata de clientes activos de nuestra clínica, tendrán confianza en nosotros y gozarán de credibilidad en lo que les comentemos, por lo que será más fácil convencerles.
Lo recomendable es que sea un veterinario, quien explique en la consulta el procedimiento de ese servicio, paso a paso y de forma detallada.
Pongamos por ejemplo la castración de una perra.
En este caso diremos detalladamente: “haremos un preoperatorio consistente en una analítica sanguínea, una radiografía y un ECG, para valorar el estado del animal, previo a la limpieza, porque su perro tiene ya 8 años. Posteriormente, le administramos un sedante para que se duerma y luego procederemos con la anestesia inhalatoria (como en los seres humanos). La voy a intervenir yo y durante la cirugía, que durará 1 hora, estará monitorizada continuamente por otro veterinario. La incisión que realizamos es mínima, 5 centímetros. Después de la operación, la llevamos a una jaula individual y controlamos su estado hasta que despierte comprobando que ha orinado y eliminado la anestesia. Cuando venga usted por ella, por la tarde, estará despierta y sin dolor. Le pondremos un collar isabelino (para que no se lama la herida y evitemos infecciones) y en una semana la veremos en consulta y eliminaremos los puntos”.
Luego daremos espacio para que el tutor pregunte y evacúe todas sus dudas y, si acaso, resolverlas.
De ser posible, el veterinario nunca debería dar el precio sino el auxiliar. Ante la pregunta del propietario, después de explicar el servicio, del precio, simplemente decir que no lo sabe, que se lo dirá el auxiliar fuera. Incluso sería recomendable dar un presupuesto y explicarlo detalladamente.
Si el cliente acepta el presupuesto y decide ir hacia delante, fijar la cita para la cirugía y explicar las condiciones y normas que debe de seguir la mascota antes de la misma (reforzar entregando información sobre cómo proceder y respuestas a determinadas dudas que puedan surgir).
Si el cliente dice que lo pensará o cualquier otra respuesta de no aceptación, intentar rebatir y convencer pero sino fuera posible, dejarlo.
No vayamos a forzar mucho y perder a ese cliente.
En caso de tratarse de personas que aún no son clientes de la clínica, deberían de ser atendidos por un veterinario que explique el proceso, aunque en menos tiempo que el anterior si se trata de una consulta gratuita otorgada como respuesta a una llamada telefónica, y luego el auxiliar darles el precio.
Aquí sí se puede forzar un poco más si hay actitudes de no aceptación, porque el cliente no es nuestro aún. Si no vuelve, tampoco estaba en nuestro fichero.

Consejos prácticos para veterinarios

Les comparto algunos datos y consejos bien concretos para entender por qué informar el precio de un servicio veterinario no es lo mismo que decir cuánto cuesta una bolsa de alimentos.

  1. El precio no es el principal decisor para una gran mayoría de los clientes al momento de contratar un servicio veterinario. Al tratarse de algo intangible, las personas que intervienen, la imagen de la clínica y otros factores influyen en la percepción de valor.
  2. Si bien hay “clientes precio” que buscan a quien menos cobre, debemos valorar si nos interesan, según nuestro modelo de negocio. Si el modelo no es de precios bajos o low cost, esos clientes no nos interesan. Además, fidelizar a este tipo de personas es imposible ya que se irán ante la primera oferta más barata que encuentren.
  3. El precio es el 3º motivo de abandono de una clínica veterinaria. El 1º es una mala comunicación entre el personal y los clientes o un error médico importante. El 2º son los componentes ambientales (no se puede estacionar, la clínica está sucia, desordenada, huele mal, hace calor, la sala de espera es muy pequeña y hay mucha gente, etc.).
  4. Fijar bien los precios de tus servicios veterinarios es fundamental y vital, porque es la única variable del marketing-mix de los servicios (las 7 P’s) que genera ingresos, mientras que el resto son gastos.
  5. Se debe ofrecer siempre el servicio veterinario “Premium”. Por ejemplo: Preoperatorio + Cirugía + Consulta de revisión posterior. Si el cliente quiere pagar menos y puede estar justificado (la mascota tiene menos de 1 año y está sana) puede reducirse el precio eliminando el preoperatorio. Es modificar el servicio, y como consecuencia baja el precio; pero el servicio es diferente.
  6. Frente a un cliente que nos dice, después de explicar el procedimiento y darle el precio, que en otra clínica se lo hacen más barato (y no está justificado lo anterior), debemos explicarle que en nuestro centro tenemos altos estándares de calidad y de atención al cliente y que consideramos que tenemos que proceder así. No importando que se vaya.

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Un informe sobre el Mercado de las apps a nivel mundial publicado por la empresa App Annie reveló que los consumidores promediaron 3 horas y 40 minutos en dispositivos móviles en 2019, un 35% más desde 2017.

Escribe Gimena Rubolino
De la redacción de Revista 2+2

Se trata de servicios útiles que pueden utilizarse dentro del negocio o sugerirse a los dueños de perros y gatos durante su visita en la clínica.
Un informe sobre el Mercado de las apps a nivel mundial publicado por la empresa App Annie reveló que los consumidores promediaron 3 horas y 40 minutos en dispositivos móviles en 2019, un 35% más desde 2017.
Según este reporte el desarrollo de este tipo de soluciones seguirá en ascenso en todo el mundo, incluyendo la Argentina.
El relevamiento además muestra que “América latina hispana es uno de los mercados móviles de más rápido crecimiento en todo el mundo, al registrar más de 2.500 millones de instalaciones durante el primer trimestre de 2021”.
Dicho relevamiento también detectó que las empresas de aplicaciones móviles en los países de habla hispana de América latina invirtieron cerca de u$s 690 millones en campañas de adquisición durante el año 2020.
Además, reveló que las apps de finanzas y negocios son las que más crecen en demanda en América latina y Google Play es la tienda dominante para las descargas de aplicaciones en Latam dado que 9 de cada 10 aplicaciones se descargan allí.
A la hora de recurrir a las apps tenemos una gran variedad en el mercado. Tienen muchas ventajas y usos de acuerdo con las necesidades de los clientes.
Algunas de las más prácticas:

Perros y gatos

  • My talking pet: esta herramienta permite dar vida a una foto de nuestro perro o gato desde nuestro teléfono o Tablet. Simplemente hay que cargar una imagen, marcarle tres áreas (ojos, boca y pera) y grabar un mensaje.
    Segundos después, la mascota repetirá lo que dijimos, moviendo los labios y los ojos. Entre otras ventajas que ofrece la aplicación, permite elegir el tono de voz, entre aguda de gato a más grave de perro y compartir el video en redes sociales o enviarlo a la casilla de mail. Está disponible tanto para equipos iOS y también Android.
  • Mi mascota: permite marcar las vacunas y desparasitación de las mascotas; además de la fecha de sus cumpleaños. Está disponible para sistema Android y es de fácil uso.
  • Back2Gether: aplicación gratuita que permite conectar a quién perdió su mascota con aquella persona que la encontró. Para eso se diseñó un mapa interactivo mediante el cual se puede marcar con exactitud el lugar en el que fue visto por última vez, dejar características del animal y así ayudar a que puedan identificarlo. Tiene una interfaz simple y está disponible español y en inglés, y también tiene su propia página web y cuenta en Facebook.

Las Apps en la clínica

Javier Pizarro, administrador de las redes de la veterinaria Merli ubicada en el barrio de Villa Crespo explica que “en la clínica nosotros utilizamos My Vete; se trata de un sistema automático de recordatorios para vacunas y turnos.
Además, cuenta con una app para los clientes que permite que tengan acceso a los estudios, turnos, etc.”
“Creo que la tecnología es una herramienta muy útil que tanto los trabajadores de la veterinaria como los clientes pueden utilizarla y sacar sus beneficios según el criterio personal” agrega.
Otras veterinarias de capital como San Sebastián, ubicada en avenida Pueyrredón y veterinaria Alem reconocen no utilizar apps por el momento.

Algunas apps para recomendar en la veterinaria

  • Friskies Cat fishing: es una aplicación para entretener a los gatos. El felino tratará de tomar a los peces que salen del agua. Cuenta con tres niveles diferentes y la puntuación se puede compartir en las redes sociales. Como recomendación el dispositivo preferentemente debe ser grande para que el gato pueda interactuar mejor; se debe colocar en una superficie plana para evitar riesgos de caída y con un protector adecuado.
  • Cat training: esta app entrega útiles consejos para solucionar problemas con los felinos como su baño, toma de medicamentos, y temas generales de conducta. Además, permite hacer un seguimiento de sus avances y entender mejor sus necesidades.
  • Dogo: es una buena herramienta para entrenar perros o cachorros de una manera sencilla. La aplicación cuenta con hasta 60 entrenamientos diferentes y trucos. Además, se pueden establecer metas, registrar el progreso de cada día y viene integrado un clicker, que emite un sonido de recompensa a nuestra mascota si lo ha hecho bien. Como ventajas destacadas: podremos ver explicaciones de expertos con los que nuestro animal de compañía puede aprender cual es el lugar y momento de ir al baño o por qué los muebles no se deben morder. Por último, dentro de la propia aplicación tenemos un chat con entrenadores expertos que brindan consejos específicos y nos ayudan a mejorar en los entrenamientos.
  • Dog Walk: esta aplicación permite controlar las rutas que siguen al pasear a nuestras mascotas.
    Además, se pueden tomar fotos.
    Si el usuario lo desea los paseos y sus estadísticas se comparten en redes sociales y se pueden colocar récords para intentar batirlos.
  • Ikibble Free: brinda detalles específicos sobre los beneficios o desventajas de cada tipo de alimento, así se puede ir aprendiendo y elaborando la dieta ideal (siempre con el consejo de un especialista) y ayudar a evitar el sobrepeso de las mascotas.
  • Nombres para perros: ofrece una recopilación de razas e información sobre los nombres más populares según el tipo de mascota.

¿Tener una App propia en la veterinaria?

A la hora de pensar en armar una app para utilizar en la clínica veterinaria y por qué no compartir con nuestros clientes es fundamental evaluar los pros y contras.
El licenciado en Informática Osvaldo Guzmán sostiene que “ante todo debemos tener en cuenta cuál es la necesidad y el tipo de usuario al que estará dirigido el servicio”.
“Es decir si la app será para uso propio o para nuestros clientes, por ejemplo. Su utilidad está determinada por la necesidad y el tipo de usuario. Este punto es importante porque los desarrolladores adaptan la app a ese público al que buscan llegar. Por ejemplo, si en la clínica la mayoría de los clientes son mayores, tendremos que pensar en una app más intuitiva que agilice cualquier tipo de manejo de información a esas personas y beneficie a la veterinaria” detalla.
Y agrega: “Con respecto al costo, esto depende del modelo de negocio y del usuario en cuestión. Según la complejidad de la app se determina el valor de inversión, dado que si tiene muchas funciones es más costosa”.
“El precio de una aplicación móvil puede ser desde 1.000 dólares hasta 120.000 o más. Todo depende de las especificaciones de la app. En lugar de pagar por el material se evalúa el tiempo necesario que requiere crear la app. Mientras que algunas aplicaciones se pueden crear en 30 horas otras pueden necesitar 300 horas”, sostuvo también en diálogo con Revista 2+2.
Y sumó: “Si la app es de servicio el fin es mejorar la atención. Hay ciertas aplicaciones que brindan un servicio que ayudan a resolver problemas y el desarrollador cobra una licencia o suscripción por el uso de la misma”.
Más allá de esto, nuestro entrevistado aseguró que “como alternativa podemos adquirir una app o sistema enlatado al que no se le pueden hacer modificaciones. Pero tiene como ventaja su bajo costo dado que es un producto masivo y también la capitalización de experiencia adquirida en el tiempo”. Y cerró: “La elección va a estar dada por la necesidad, funcionalidad y usuario final al cual estará dirigido. Estos productos se pueden conseguir por un pago único que ronda los 100 o 1000 dólares o por licencias mensuales o anuales de 20 dólares en adelante», concluye.

De forma verbal, corporal y actitudinal comunicamos quiénes somos y cómo hacemos nuestro trabajo. Una buena o mala comunicación puede determinar sumar o perder clientes.

Escribe Javier Sánchez Novoa
MERCADER Consultora en Gestión Veterinaria.
javier.sanchez@consultoramercader.com.ar

¿Por qué es necesario pensar en la comunicación que ocurre dentro del consultorio veterinario?
¿No comienza y termina en la conversación con el/la cliente/a?
La realidad es que no, tengo que decirte que hay mucho más que eso, y ese “más” es el que va a definir la generación de valor. Pero ordenemos un poco los conceptos relacionados con el proceso de comunicación en el consultorio.
Dentro de los elementos que componen la comunicación entre tu clínica veterinaria y tu cliente se encuentra la que se genera a partir de vos como actor clave en el proceso y también la que transmite el serviespacio, que es el lugar donde se genera la “producción del servicio” (ver recuadro).
Entre vos como profesional y tu cliente, el tutor de la mascota, se producen dos tipos de comunicación, la verbal (palabras) y la no verbal (tu cuerpo), que van a representar el 80% de toda la información que le transmitas.
El 20% restante estará determinado por el serviespacio.

Cuadro N° 1: Elementos que componen la comunicación en el consultorio.

Para que este proceso sea eficiente la comunicación debe ser, por un lado, efectiva, es decir que el mensaje llegue correctamente al receptor.
Por otro lado, debe ser asertiva, lo que implica valerse de la inteligencia emocional para poder llegar al interlocutor de forma armoniosa, buscando un equilibrio entre los dos puntos negativos, la pasividad y la agresividad. Este tipo de comunicación hace que nuestros puntos de vista, deseos y sentimientos puedan llegar de forma honesta, sincera y con respeto al interlocutor.

Agresivo, pasivo o asertivo

Para entender mejor qué es la comunicación asertiva, veamos un ejemplo. Cuando llega un cliente a la clínica y plantea un posible diagnóstico para la patología de su mascota que encontró en Internet, vos podés reaccionar de varias formas:

  • Agresivamente: Te enojás, te sentís ofendido y expresás este enojo a través de señales verbales y no verbales. Sin escuchar su punto de vista, das por terminada la consulta o continuás pero habiendo generado un clima negativo.
  • Pasivamente: Hacés de cuenta que lo escuchás, pero en realidad no lo estás haciendo ya que no le das valor a sus palabras, pasás por alto todo lo que te dice. Aunque no lo digas, esto también será comunicado con tus acciones y el cliente podrá registrarlo. Como no tenés una escucha activa hacia tu cliente y lo que tiene para decirte, lo menospreciás con tu actitud y le hacés sentir que el poder es tuyo.
  • Asertivamente: Escuchás lo que tiene para decirte, buscás la forma de entender su preocupación, empatizás con tu cliente e intercambiás información. Le transmitís que lo felicitás por el interés que tiene por su mascota y lo ayudás a completar la información que necesita. No lo subestimás y valorás su colaboración.

¿Complicado? No, solo debemos comenzar a cambiar el chip al momento de comunicarnos con los clientes. No es algo menor, incluso tenés que saber que el flujo de comunicación es continuo y está formado por cuatro actores, físicos y reales, como se ve en el Cuadro N° 2.

Cuadro N° 2: Flujo de comunicación.

Generar valor

Vamos a introducir un concepto que apenas nombramos al comienzo de la nota y es muy relevante: la comunicación genera valor. Fijate qué importante es gestionarla activamente en el consultorio. Sé lo que me vas a decir: ¡Yo estudié Ciencias Veterinarias, no marketing! y te contesto lo mismo en cada nota, ya no basta con ser el mejor profesional, también hay que saber comunicarlo. De esa manera vas a poder generar las experiencias positivas que serán las que van a determinar el momento de la verdad (cuando el cliente entra en contacto con tu servicio y te evalúa) y en consecuencia la generación de valor.
La generación de valor en los servicios veterinarios y su comunicación no tiene nada que ver con el dinero o los honorarios. Radica en eso que hacés diferente, eso que vos creás que hace que sea muy difícil para tus competidores igualarte, por eso tenés que conocer qué variables intervienen en este concepto clave.
En este caso te invito analizar el concepto de valor asociado a vos como comunicador/a. Víctor Küppers nos ayuda con esta ecuación:

Ecuación de valor
Valor = (conocimientos + habilidades)
x actitud

Lo interesante de esta ecuación de generación de valor es que deja en claro que si bien es fundamental contar con habilidades técnicas, conocimientos y experiencia profesional, eso no es todo. La actitud es un factor multiplicador, si tu actitud es baja o nula al momento de comunicarte con tu cliente, la generación de valor es cero más allá de que cuentes con amplios conocimientos técnicos (como ya sabemos, todo número multiplicado por cero es igual a cero).
Hoy el cliente busca algo más que conocimientos, busca ser escuchado y sentirse valorado, todo evoluciona, ¿Vos evolucionaste?

Está en tus manos

La comunicación es un proceso complejo que abarca muchas aristas y donde la actitud es clave, especialmente en la profesión veterinaria, donde los productos y servicios que se ofrecen están relacionados a la salud de las mascotas del cliente.
Lo positivo de todo esto es que adoptar una correcta actitud en la comunicación depende de vos. Tenés que trabajar en seguir perfeccionando los procesos comunicativos, el asertividad y la escucha activa.
Te invito a seguir abriendo el foco en la observación y seguir optimizando la comunicación hacia tu cliente. Tené en cuenta estas sugerencias y nunca subestimes la visión del cliente, que es quién finalmente pone en marcha el motor de tu empresa.
¡Manos a la obra!

¿Qué comunicás con tu serviespacio?

El serviespacio, ese lugar donde ocurre la venta del servicio o producto, es otra forma de comunicación. Es silenciosa pero continuamente le toca el hombro a tu cliente y le dice: “mirá, somos esto”.
Los espacios de tu veterinaria comunican tu esencia. ¿Da lo mismo comunicar prolijidad, orden y pulcritud? ¿Acaso el cliente no lo ve? Sí, lo ve todo. Para esto te invito hacer un ejercicio que te ayudará a determinar qué estás comunicando a tus clientes con tus instalaciones.
Comencemos un tour por tu clínica desde la puerta. Observá cómo está tu vidriera, revisá la limpieza, el estado general y los vinilos o cualquier cartel que hayas pegado. Hacé lo mismo con la puerta de entrada a la veterinaria.
Luego pasemos al salón. Chequeá con ojos de cliente la intensidad de la luz, el orden, los aromas, el piso y todo lo que el cliente puede observar ya que aquí es donde comienza a evaluarte.
Vayamos hacia el mostrador y hacé el mismo ejercicio. Observá y preguntate si es una barricada para apoyar los productos y papeles que no sabés dónde poner o si es un espacio ordenado y amigable para el cliente.
Chequea constantemente el estado de los baños, importantísimo.
Luego ingresá a tu consultorio y revisá todo: luz, orden, limpieza, camilla, escritorio, aroma, mesada, orden de la medicación, todo esto también habla de vos. Es claro que al cliente le interesa que le soluciones la necesidad de su mascota, pero también valora el entorno y se forma una imagen de vos como profesional a partir de esos datos que recibe aún sin darse cuenta.
Por último, te recomiendo que capacites a tu equipo de atención al cliente, conversen sobre estos puntos de chequeo y elaboren un check list para controlar todas estas áreas a partir de una tabla y se asignen responsables de la ejecución.

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