2020 - Página 37 de 39 - Mi Negocio Veterinario
MNVet – Descargar Impreso – Main
Home2020 (Page 37)

A continuación, un resumen de las principales jornadas del rubro veterinario postergadas o conceladas. Información necesaria para reorganizar agendas.

La pandemia de coronavirus requiere ciertas medidas a cumplir para prevenir más casos de infección en el país y en el mundo. 

Por este motivo, el Gobierno nacional decidió suspender todo evento masivo, decisión que se sumó a la que ya -voluntariamente- habían decidido muchos organizadores de eventos en el rubro veterinario.

En estos próximos meses se iban a llevar adelante varios eventos del sector, con un amplio abanico de posibilidades para que los profesionales veterinarios puedan informarse de las nuevas investigaciones, capacitarse, crear lazos laborales y mucho más.

Fue la situación del COVID-19 la que los vio obligados a suspender y postergar las jornadas, principalmente para el mes de septiembre y en adelante. Conversamos con las empresas organizadoras y estas son las últimas actualizaciones:

Jornadas Veterinarias de Intermédica: SUSPENDIDO

“Esta drástica decisión, tomada bajo estrictas recomendaciones de la OMS y del Ministerio de Salud de la Nación, tiene la única finalidad de prevenir los riesgos de contagio y propagación del virus”, explicó la presidenta de Intermédica Sonia Modyeievsky en un comunicado de prensa, suspendiendo así el evento que se llevaría adelante los días 26 y 27 de abril. 

En cuanto a la nueva fecha asignada: “Esta decisión será tomada por nosotros después de comunicarnos con nuestros amigos de AVEACA, para ver en qué fecha tienen proyectado su evento y no superponernos, ya que respetamos que ellos siempre lo hacen en la segunda mitad del año”. 

Más información en: www.jornadasveterinarias.com.

Expo Veterinarias: SUSPENDIDO

“Esta decisión nos permite seguir garantizando una Expo y un Congreso de máxima calidad, que se caracteriza cada año por el éxito en su convocatoria, reuniendo en dos días a miles de visitantes de Argentina y de otras partes del mundo”, comunicaron desde Expo Veterinarias, muestras que se hubiera llevado adelante en junio de 2020. Las nuevas fechas serán el 26 y 27 de septiembre. Más información en: www.expovet.com.ar

Curso de DNT INTA BIOINNOVO + Crianza Artificial: SUSPENDIDO

“Hemos decidido suspender la realización del curso. Estamos seguros de que compartirán con nosotros las razones de esta decisión”, comenzó el comunicado oficial enviado desde el laboratorio Vetanco, posponiendo el encuentro que hubiera tenido lugar en los próximos días. Aseguraron que en los próximos meses “inscriptos, disertantes locales y extranjeros, podrán aprovecharlo con la tranquilidad y confianza que se merecen”.

4to Outlook de la Cadena Láctea 2020: SUSPENDIDO

“Se suspende el encuentro que iba a tener lugar en la ciudad de Rosario, Santa Fe, el 1 de abril, hasta la definición de una nueva fecha que será informada con suficiente anticipación”, informaron desde la organización. Y aclararon que “para quienes hayan abonado la preinscripción, la misma conservará su validez para una nueva fecha. Aquellos que quieran un reintegro, pueden enviar un correo electrónico a outlooklechero2020@gmail.com para tramitar el mismo”.

Congreso Mundial de Brangus: SUSPENDIDO

“Se comunica que aquellas personas que hayan confirmado su participación serán contactadas por la agencia oficial para resolver en cada caso lo que la situación requiera”, aclararon desde la organización de un Congreso de relevancia mundial, que se iba a realizar del 15 al 24 de abril. 

El evento se pospone para el año que viene.

Aniversario de la Sociedad de Medicina Veterinaria (SOMEVE): SUSPENDIDO

“En virtud de esta nueva situación, y como agentes primarios de salud, debemos actuar responsablemente y adoptar decisiones que hubiésemos preferido no tomar”, comunicó la presidenta y el secretario de la Sociedad que iba a realizar este evento a fines de marzo. Aún se desconocen la nueva fecha.

Congreso Federal de Asociación de Anestesia y Analgesia Veterinaria de la República Argentina (AAVRA): SUSPENDIDO

El Congreso estaba planificado para el 29, 30 y 31 de mayo. Aún se desconoce las nuevas fechas. Más información: www.aaavra.com.ar

Sin dudas se han suspendido o cancelado algunos otros eventos que se irán informando paulatinamente. Asimismo, vale decir que tanto laboratorios, como distribuidoras de productos veterinarios han postergado charlas, talleres, capacitaciones y eventos presenciales hasta nuevo aviso.

Compartimos el reporte emitido por el Ministerio de Salud de la Nación el pasado 15 de marzo respecto de la actualidad del COVID 19 en Argentina y el mundo.

El pasado 15 de marzo, el Ministerio de Salud de la Nación compartió un trabajo en el cual se resume la situación actual del Novel Coronavirus 2019 en Argentina y el mundo.

Descargar PDF con información del Ministerio de Salud

En el documento, los interesados podrán encontrar información ligada a:

  • Situación en España, Italia y Francia.
  • Situación regional en América, con foco en Brasil y Chile.
  • Situación en Argentina con descripción de casos.
  • Distribución por grupos etarios de casos confirmados en el país.
  • Procedencia de los casos positivos.
  • Acciones implementadas.

Para solicitar el informe completo: info@dosmasdos.com.ar

A raíz de la expansión del coronavirus por más de 150 países, incluido el nuestro, la industria veterinaria sumó acciones en favor de resguardar la salud de las personas. ¿Y el Senasa?

Los principales referentes del rubro de laboratorios y distribuidoras de productos veterinarios tomaron medidas en sus ámbitos laborales actuando con la máxima profesionalidad y dispuestos a colaborar con la autoridad sanitaria en todo lo que hace a mitigar la propagación del nuevo Coronavirus.

Como agentes que garantizan y resguardan la salud animal pero también la salud pública, las principales medidas de estas empresas fueron, hasta el momento, las siguientes:

  • Cuarentena obligatoria a empleados provenientes de los países de riesgo.
  • Cierres momentáneos de oficinas, evaluando cómo seguir en unos días.
  • Suspensión de reuniones presenciales.
  • Eventos, jornadas, capacitaciones, viajes y similares, suspendidos.
  • Home office para buena parte de los empleados (principalmente administrativos, Marketing, Ventas, etc).
  • Flex time para evitar moverse en horas pico.
  • Licencias para personal con problemas médicos o mayores a 60 años.
  • Si bien las áreas de producción siguen trabajando para garantizar el abastecimiento, se extremaron las medidas de prevención. 
  • Se restringió el ingreso de proveedores a las empresas. 
  • Aumentaron las medidas de higiene personal.
  • En muchos casos, las personas que trabajan a campo han visto reducida su movilidad. 
  • Se ha destacado la necesidad de impulsar el uso de medios electrónicos para realizar pedidos y consultas por teléfono, mail, WhatsApp y redes sociales.

Más allá de esto, desde los laboratorios veterinarios han garantizado los servicios de logística, abastecimiento y la continuidad de la producción.

Las distribuidores siguen este mismo camino, reforzando incluso la posibilidad de que los veterinarios puedan seguir realizando sus pedidos por vías digitales (incluidas las aplicaciones de e-commerce) y telefónicas (WhatsApp).

¿Y el Senasa?

En cuanto a las medidas tomadas por el Senasa, según pudo averiguar REVISTA 2+2, el vicepresidente del organismo Carlos Milicevic, junto con la presencia de los directores nacionales y otras áreas del organismo, analizó las acciones a seguir para continuar con las actividades sustanciales sin poner en riesgo a los agentes. 

Así fue como se dispuso a restringir al mínimo la presencia de personal en la sede central, laboratorio y centros regionales. 

Asimismo, se solicitó a cada área que designe, en el caso de corresponder, guardias mínimas mientras que el resto del personal, que no esté alcanzado por licencias médicas, realice el trabajo de manera remota desde sus hogares.

La evaluación de solicitudes de registro que se tramitan bajo el formato de expediente electrónico se continuará realizando en forma remota por los agentes de registro.

Respecto de la atención en mesa de entradas el horario será de 10 a 13 horas. y solo se recepcionarán y entregarán autorizaciones de importación, exportación y certificados de libre venta. Las solicitudes de órdenes de pago deben realizarse únicamente por correo electrónico a pagosdpv@senasa.gob.ar.

Hasta tanto se levanten las medidas implementadas, el organismo suspende la toma de vista y notificación de expedientes, entrevistas y reuniones programadas.

Por último, en los lugares donde agentes del Senasa deban estar presente (puestos de fronteras, frigoríficos, etc.), se proveerá de elementos de prevención como barbijos, guantes, y demás al personal y se solicitará a las empresas donde hay presencia de nuestros agentes que hagan lo mismo.

El 70% de las enfermedades emergentes tienen un origen animal y el 65% de las infecciosas que aquejan a la población humana, son zoonóticas.

Vet. Pablo J. Borrás MSc.
pablojesusborras@gmail.com

Todos hemos visto alguna película en donde, con ciertos tintes apocalípticos, una pandemia producida por algún virus arrasa rápidamente con la humanidad, generando pánico a escala global. Siempre, al final, un grupo de héroes salvan, casi de milagro y con más suerte que técnica, al planeta.
Es el caso de la Amenaza de Andrómeda (1971), Epidemia (1995), Contagio (2011) y Virus (2013), entre otras.
Estas últimas semanas hemos estado sensibilizados con la noticia sobre la emergencia de un nuevo Coronavirus (Covid – 19) que genera, principalmente, cuadros respiratorios y que ahora sabemos que puede transmitirse persona a persona. Ya tenemos los primeros casos en Argentina y se ha reportado en otros lugares de las Américas.
Sin embargo, a pesar de algunas noticias fatalistas y de las “fake news”, la mortalidad de este virus es baja, siendo de mayor riesgo para personas con enfermedades crónicas o inmunosupresión. Se estima que muchos pacientes, principalmente los niños, pueden ser asintomáticos o más resistentes a la infección. Al ser un virus envuelto es más lábil a condiciones ambientales y a los desinfectantes. Nadie conoce el futuro de este brote, pero estos son datos certeros que, a la fecha, conocemos.

¿Y las mascotas?

En cuanto al coronavirus y las mascotas, es clave recordar los informes de la WSAVA (World Small Animal Veterinary Association): hasta la fecha no existe evidencia de transmisión por contacto con perros o gatos, así como que estos puedan enfermar del novel coronavirus. El reporte realizado por la Asociación el 29/2 comenta la situación de un perro de Hong Kong que dio débilmente positivo al coronavirus (Covid-19): se puso en cuarentena y se sigue estudiando. La presencia no es inherente a infección activa ya que puede ser solo una exposición al patógeno debido a estar en un ambiente contaminado.
En las siguientes semanas tendremos seguramente más información.

En cuanto a las mascotas, es clave recordar los informes de la WSAVA: hasta la fecha no existe evidencia de transmisión por contacto con perros o gatos, así como que estos animales puedan enfermar del novel coronavirus.

Algo interesante, es que probablemente haya habido un “salto” de una especie animal (se ha postulado serpientes, murciélagos y pangolines, entre otros) al hombre.
Recordemos que los primeros casos, producidos en Wuhan (China), ocurrieron en un mercado popular donde se comercializan animales vivos. Hasta hoy, no se ha podido dilucidar qué especie animal es responsable de esto y según la prestigiosa revista Nature aún tenemos un largo camino que recorrer.
Ya hemos visto esto anteriormente, cuando pensamos en Ebola, en SARS, Influenza Aviar y muchos otras patologías. Recientemente, otro coronavirus conocido como MERS, produjo un brote en Medio Oriente donde la fuente de contagio fue el contacto directo o indirecto con dromedarios infectados.
Aunque no tuvo la escala mediática que tuvo su primo hermano de Wuhan, el mismo produjo un total 2.499 casos confirmados y una letalidad de casi el 35%
Hoy sabemos muy bien que el 70% de las enfermedades emergentes tienen un origen animal (OMS, 2011) y que el 65% de las enfermedades infecciosas que aquejan a la población humana son zoonosis. Las zoonosis son aquellas enfermedades que se transmiten de forma natural de los animales a los humanos.
Cada una de ellas con su complejidad, con sus ciclos de transmisión, con problemáticas particulares, con poblaciones vulnerables. Cada una con un escenario que requiere diferentes miradas y distintas respuestas.
De todo esto, se desprende algo fundamental: atender la salud animal es preservar y velar por la salud humana. Ya sea en el consultorio, en el campo, en el frigorífico, en un laboratorio o donde sea.
Lo dijo Luis Pasteur: “La medicina cura al hombre, la medicina veterinaria a la humanidad”. Por eso es clave la necesidad de la participación de los veterinarios, así como de tantas otras profesiones, en la resolución de problemas que competen a la salud y el bienestar común.
¿Con qué nuevos desafíos nos encontraremos en este Siglo? Es un misterio.
Solo sabemos que el rol de los veterinarios será una pieza clave para desvelar, poco a poco, este complejo mundo que son las epidemias y las pandemias.

A raíz de la detección de un “positivo leve” de coronavirus en un perro en Hong Kong, la WSAVA brindó recomendaciones para que los veterinarios en todo el mundo asesoren correctamente a sus clientes.

El coronavirus despertó preocupación en todo el mundo tras la constante suma de afectados por la enfermedad. Si bien inicialmente no había evidencia clara de transmisión de persona a persona, en las últimas semanas se está propagando por todo el mundo.

Ahora la gran pregunta es ¿el coronavirus afecta a los animales?

La Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales (WSAVA) informó que actualmente, no hay evidencia que sugiera un huésped animal específico como reservorio de virus. De todas formas, se están llevando a cabo más investigaciones.

Descargá acá el informe completo de la WSAVA

Existe hace un tiempo casos de coronavirus canino -que puede causar diarrea leve- y de coronavirus felino -que puede causar peritonitis infecciosa felina (FIP)-. Estos mismos no están asociados con el brote actual de coronavirus.

El terror en China es tal que hay problemas relacionados con el abandono de mascotas como “medida de prevención”.

Esto reafirma la necesidad de que los Comités Científicos y One Health de la WSAVA brinden respuestas certeras para que veterinarios de todo el mundo transmitan tranquilidad y que puedan hacer frente a las preocupaciones de sus clientes.

Datos concretos

  • Hasta el día de la fecha, aseguran que no hay evidencia de que los animales de compañía puedan infectarse o propagar COVID-19. Esta es una situación en rápida evolución y la información se actualizará a medida que esté disponible.
  • Los dueños de mascotas deben evitar el contacto con animales con los que no están familiarizados y siempre lavarse las manos antes y después de interactuar con los animales.
  • Si los propietarios de las mascotas están enfermos con COVID-19, deben evitar el contacto con animales en su hogar, incluso acariciar, acurrucarse, ser besado o lamido, y compartir alimentos.

Caso dudoso

El 28 de febrero indicaron que un perro de un paciente infectado en Hong Kong había dado un resultado «débilmente positivo» a COVID-19 después de las pruebas de rutina.

Entrando en detalles, el 5 de marzo el Departamento de Agricultura, Pesca y Conservación de la RAE de Hong Kong (AFCD) informó que se analizaron muestras nasales, orales, rectales y fecales del perro. El 26 y 28 de febrero, los hisopos orales y nasales fueron positivos, mientras que el 2 de marzo, solo los hisopos nasales mostraron resultados positivos.

Las muestras rectales y fecales resultaron negativas en las tres ocasiones.

Las pruebas realizadas tanto en el laboratorio veterinario del gobierno (AFCD) como en el laboratorio de diagnóstico de CoV humano acreditado por la OMS en la Universidad de Hong Kong (HKU) detectaron una baja carga viral en los hisopos nasales y orales.

Ambos laboratorios utilizaron el método de reacción en cadena de la polimerasa de la transcriptasa inversa en tiempo real (RT-PCR) y los resultados indicaron que había una pequeña cantidad de ARN viral COVID-19 en las muestras. Sin embargo, no indicaron precisamente si las muestras contienen partículas virales intactas que son infecciosas, o sólo fragmentos del ARN, que no son contagiosas.

 El rol de los veterinarios frente a la amenaza

Las vacunas de coronavirus canino disponibles en algunos mercados mundiales están destinadas exclusivamente a proteger contra la infección por coronavirus entérico y no tienen licencia para protección contra infecciones respiratorias.

Además, los veterinarios no deben usar dichas vacunas ante el brote actual pensando que puede haber alguna forma de protección cruzada contra COVID-19.

Cómo indicaron de WSAVA, no hay absolutamente ninguna evidencia de que la vacunación de perros con vacunas disponibles en el mercado proporcione protección cruzada contra la infección por COVID-19, ya que los virus entéricos y respiratorios son variantes claramente diferentes de coronavirus.

Tras brindar esta información, WSAVA alienta a los veterinarios a mantenerse en contacto cercano y seguir las instrucciones de su autoridad veterinaria local.

¿Qué debería hacer el Servicio Veterinario Nacional?

Las autoridades nacionales de Salud Pública, así como el Servicio Veterinario deben trabajar en colaboración utilizando el enfoque “Una Sola Salud” con el fin de compartir información y realizar la evaluación de riesgos cuando una persona afectada por el virus COVID-19 informa estar en contacto con animales de compañía u otros animales.

Si tras la evaluación de riesgos se decide realizar las pruebas a un animal de compañía que esté en contacto directo con una persona/dueño infectado por el virus COVID-19, se recomienda su realización mediante RT-PCR en muestras orales, nasales y fecales/rectales.

Mientras no existan pruebas de propagación de la infección por COVID-19 de un animal a otro, se considera una buena práctica mantener alejados a los animales que hayan dado positivo al virus COVID-19 del resto de animales.

Fuente de la información: https://wsava.org/news/highlighted-news/the-new-coronavirus-and-companion-animals-advice-for-wsava-members/

Chemtest presentó VETSTRIP, un nuevo test que permite el diagnóstico de esta zoonosis en solo diez minutos y en un solo paso.

El laboratorio argentino Chemtest lanzó al mercado un nuevo producto que permite detectar los síntomas de la brucelosis canina en diez minutos, sin necesidad de infraestructura ni personal entrenado para realizarlo.

El nombre comercial del producto es VETSTRIP®, se trata de un test inmunocromatográfico -una de las técnicas de inmunodiagnóstico más modernas- diseñado para la detección de los anticuerpos que protegen la membrana externa de las bacterias (los anticuerpos IgG -inmunoglobulina G-). Funciona de manera similar a las pruebas de embarazo o de insulina.

Chemtest es una startup que desarrolla sistemas de diagnóstico de enfermedades como chagas, síndrome urémico hemolítico y dengue. En este caso, el test se utiliza para el diagnóstico de la brucelosis canina, una enfermedad infecciosa crónica de perros que causa abortos e infertilidad. Se trata de una zoonosis de distribución mundial, que afecta tanto al hombre como a los animales domésticos, cuya prevalencia en la Argentina es de alrededor del 5% en perros y del 3% en personas adultas, según los últimos relevamientos realizados por la Universidad de San Martín.

El VETSTRIP® Brucelosis Caninos es plataforma tecnológica de ‘tira reactiva’ que muestra el resultado en diez minutos. El investigador del IIB-INTECH, Diego Comerci, uno de los socios fundadores de Chemtest, explicó que esta tecnología de manipulación de la materia a escala nanométrica se logró a partir de las glicoproteínas recombinantes, que son moléculas de reconocimiento celular aplicadas sobre bacterias. “Es una tecnología muy novedosa a nivel mundial que permite diagnosticar las enfermedades y confirmar el diagnóstico con mayor eficacia”, destacó Comerci.

“Los kits desarrollados en Chemtest son probados en distintos centros públicos de diagnóstico”, explicó el biotecnólogo Andrés Ciocchini, también investigador del IIB-UNSAM y otro de los socios fundadores de Chemtest. “Para los de detección de brucelosis de uso veterinario trabajamos con el laboratorio del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA)”, declaró Ciocchini, y agregó que recientemente presentaron un test rápido para el diagnóstico del dengue, lograron la aprobación de cinco productos de uso veterinario y otros tantos están a la espera de ser aprobados por la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) para su uso en humanos.

Características del VETSTRIP® Brucelosis Caninos

  • Único test inmunocromatográfico basado en el uso de lipopolisacárido rugoso (LPSr) para el diagnóstico de brucelosis canina.
  • Máxima sensibilidad y especificidad.
  • Test rápido en un solo paso.
  • Puede ser usado como prueba de tamizaje en campañas de control y erradicación de la brucelosis bovina.

Junto con el equipo técnico del área de Animales de Compañía de Tecnovax analizamos un tema concreto: ¿cómo evitar las fallas en la vacunación de los perros contra el parvovirus?

Desde hace ya un tiempo, la división Animales de Compañía de Tecnovax apuesta por la transmisión de conocimientos hacia los médicos veterinarios con el objetivo de impulsar la vacunación para prevenir enfermedades en los perros, fomentando así la mejor calidad de vida de los animales y haciendo un aporte a la Salud Pública, evitando el contagio a las personas. De ese modo, el laboratorio nacional se encuentra trabajando codo a codo con los círculos profesionales de Buenos Aires, recorriendo veterinarias para capacitar a sus profesionales e iniciando un vínculo formal con Facultades y Hospitales Veterinarios del país.

“Buscamos hacer del conocimiento una ventaja comparativa. Es parte de nuestra propuesta de valor”, le explicó a Revista 2+2 el gerente de la unidad de negocios de Tecnovax, Rafael Mercado.

Vale decir que de nuestro encuentro llevado adelante en las oficinas con que Tecnovax cuenta en San Fernando, Buenos Aires, también participaron los médicos veterinarios Leandro Martínez Melo, Fernando Iparraguirre y Leonardo Mauro, siendo este último quien destacó la participación de la empresa en la pasada edición del Congreso de León, en México, a comienzos de septiembre.

Tecnovax comercializa desde hace años su línea Providean Viratec para pequeños animales en aquel país, donde cuenta con la firma LAPISA como aliado estratégico en la comercialización y distribución de sus productos.

“El tema que planteamos fue bien concreto y tuvo que ver con cómo evitar fallas en la vacunación contra parvovirus”, nos explicó el responsable técnico de la línea Providean Viratec en el laboratorio. Y sostuvo: “En este punto, los expertos internacionales coinciden en que el primer paso tiene que ver con actualizar los esquemas de vacunación en los perros, dejando ya atrás algunos viejos criterios o paradigmas; tomando a la vacunación como un acto médico individualizado y no una práctica automática en la cual existe una receta que aplica a todos los animales”.

Más allá de esto, el profesional destacó que el principal problema tiene que ver con el lógico desconocimiento respecto del caudal de transferencia de anticuerpos que recibe cada cachorro desde su madre a través del calostro. “Esta transferencia se toma como un blanco o negro, pero en realidad está conformado por una gran gama de grises. Dentro de un mismo grupo de animales, podemos encontrar algunos que recibieron muchos anticuerpos, otros que recibieron pocos y otros nada”, explicó Mauro. Y agregó: “Si bien en la medicina de pequeños animales atendemos individuos (y debemos contemplar sus particularidades), es clave avanzar en el concepto de cobertura vacunal poblacional, para reducir las posibilidades de contagio”.

¿Cuál es el riesgo?

Más allá de esto, señaló Leandro Martínez Melo, profesional referente de la firma para la Zona Oeste de la provincia de Buenos Aires, otra variable a considerar para evitar fallas en la vacunación contra parvovirus es el riesgo de infección. “Un plan que no contempla esta variable puede llegar a fracasar”, aseguró el también veterinario. Y agregó: “Buscamos evitar que se sigan aplicando criterios que tienen que ver con mecanismos automáticos de vacunación, como son la cantidad de dosis”.

Frente a esto, Leonardo Mauro fue contundente: “La forma de diseñar y evaluar el plan debe estar basada en el riesgo de ese cachorro de enfermar. Y como realmente es complejo evitar el contacto con los patógenos, la recomendación es vacunar basados en la evidencia científica, sobre todo frente al abanico de circulación que tenemos en el país”.

Como se dijo, de la entrevista también formó parte el MV Fernando Iparraguirre, quien destacó que aún en una misma zona geográfica puede haber lugares con cargas virales y riesgos de infección distintos. “Impulsamos que se revisen los planes de vacunación y se adecúen a la zona y al riesgo de los animales”, aseguró Iparraguirre. Y reforzó: “Hay muchas certezas erradas sobre el uso de las vacunas y esto también se ve reflejado entre los tenedores de animales de compañía”.

Frente a esto y en base a su experiencia a campo, Leonardo Mauro destacó que la vacunación es una rama de la veterinaria que contempla aspectos más allá de la inmunología, que los veterinarios utilizan a diario y para la cual la permanente actualización técnica resulta vital.

Debemos dejar atrás viejos criterios, tomando a la vacunación como un acto médico individualizado y no como una práctica automática en la cual tenemos una receta que aplica a todos los animales”. Leonardo Mauro.

“El acto de vacunar es una prescripción médica específica, no puede haber una sola recomendación para todos los casos, tiene que ser individualizado, contemplando el impacto sobre la población”, aseguró el profesional para luego compartir con Revista 2+2 los cuatro escenarios a considerar en lo que pueden darse fallas de vacunación contra el parvovirus.

“Por un lado, tenemos aquellos cachorros que reciben una muy baja transferencia de anticuerpos maternos. En este caso, y si el riesgo de contagio es elevado corresponde no esperar hasta las 6 a 8 semanas para empezar a actuar ya que los animales podrían ser susceptibles al parvovirus desde las tres o cuatro semanas. Luego podemos encontrarnos con perros que se enferman durante el transcurso del plan de vacunación.

En este punto es clave evaluar la ventana crítica de susceptibilidad, tratando de reducirla al máximo en ambientes con alta prevalencia del virus, interviniendo sobre los intervalos de vacunación: no siempre deben ser de 21 días”, explicó Mauro. Y continuó: “Otro gran interrogante muchas veces tiene que ver con cuándo se debe finalizar el plan. En este caso, vale decir que, si la última dosis del plan inicial no se aplica a las 16 semanas, seguramente quedarán algunos animales sin proteger. Y finalmente debemos intervenir también sobre la vacunación en perros adultos, no solo para prevenir la aparición de signos clínicos de parvovirosis, sino fundamentalmente para que estos no se infecten y diseminen el problema”.

“Para abordar estos temas Tecnovax cuenta con vacunas diferenciales para hacer vacunación temprana antes de los 45 días (Viratec DP -Parvo y Moquillo, con alto título viral). Luego tenemos Primotec AT monovalente contra parvo, con altísimo título. En ambos casos podemos abordar la vacunación temprana”, aseguró Martínez Melo. Y completó: “Esto es clave porque la vacuna quíntuple no está recomendada para usar antes de las seis semanas. Lógicamente luego contamos con otras herramientas concretas para abordar la problemática, como son las vacunas tradicionales que protegen a los perros contra las diferentes enfermedades”.

Así lo sostiene el MV Pablo Borras, con quien pudimos dialogar no solo sobre la prevención y el control de las enfermedades transmitidas por vectores, sino también de otros temas ligados a la profesión.

Desde hace un tiempo solemos asistir a conferencias y talleres para veterinarios, orientados específicamente al tratamiento de las enfermedades transmitidas por vectores en perros y gatos. Este ha sido un tema cada vez más importante para el día a día de los profesionales, a la vez de abrir un campo para que comiencen a surgir nuevas voces, con mensajes claros y concretos en referencia al tema.

Y este es el caso del médico veterinario Pablo Borras, quien a sus 37 años ya forma parte del Tropical Council for Companion Animals Parasites, junto a referentes como Gad Baneth, Gabriela Pérez Tort, Peter Irwin, Filipe Dantas Torres y Rebecca Traub, entre otros.
“Me recibí en la FCV de la UBA y tuve muchas instancias de formación, tanto de mi propia Universidad, como -posteriormente- con cursos de posgrado dentro y fuera del país”, asegura el profesional que también fue concurrente durante dos años en el Servicio de Zoonosis del Hospital Francisco J. Muñiz. “Esto me dio la oportunidad de ver las zoonosis y las enfermedades vectoriales desde otro lado”, le explicó Borras a Revista 2+2, al tiempo que resaltó el modo en que fue combinando estas experiencias, con su Maestría, sus distintos proyectos de investigación y los años que se desempeñó en la clínica de mascotas.

Mi objetivo es seguir perfeccionándome para generar este espacio, el de la prevención y el tratamiento de enfermedades transmitidas por vectores, en el consultorio de pequeños animales”.

“Mi objetivo es seguir perfeccionándome para generar este espacio, el de la prevención y el tratamiento de enfermedades transmitidas por vectores, en el consultorio de pequeños animales”, aseguró el profesional con el cual compartimos un mano a mano para este medio.

Revista 2+2: ¿Cuáles son los desafíos que enfrentan los veterinarios en el control de las enfermedades vectoriales?

Pablo Borras: El mundo se ha modificado por diferentes razones: el cambio climático, la dinámica de los artrópodos vectores y las infecciones que transmiten, los movimientos de los animales dentro y fuera del país, el mayor conocimiento frente a estas problemáticas y el acceso a mejores herramientas diagnosticas.
Todo esto genera un continuo y arduo desafío para el clínico.
Hace unos años apenas se conocía sobre la Ehrlichiosis en perros, o que la Leishmaniosis Visceral tiene rutas alternativas de transmisión; o que los gatos deben ser protegidos contra garrapatas porque hay patógenos que los afectan.
Debemos considerar también otros cambios que se han producido como el advenimiento de diferentes herramientas diagnosticas (principalmente a nivel molecular) y de estrategias de prevención como, por ejemplo, el uso de comprimidos para pulgas y garrapatas.
Aprovechando la pregunta, es bueno recordar la necesidad de usar productos adecuados (comprimidos, pipetas y/o collares) para disminuir el riesgo de transmisión de patógenos a nuestras mascotas.
Por otro lado, no olvidar la asesoría con el veterinario de cabecera, que indicará lo más adecuado para cada animal: la mejor opción es la medicina preventiva.

¿Cuánto han podido transmitir los veterinarios a las personas la importancia de prevenir estas enfermedades?

Los veterinarios somos agentes de salud y es en el consultorio el momento para poder transmitir estos conceptos. Es fundamental la educación para asegurar mascotas sanas y prevenir enfermedades zoonóticas.
Es una acción sostenida en el tiempo la que se necesita, teniendo en cuenta las diferentes realidades: cada mascota, cada propietario, cada lugar. El mensaje se basa en la medicina preventiva, la tenencia responsable y el control veterinario.
La prevención de las enfermedades transmitidas por vectores consiste precisamente es eso, en buscar estrategias de control para cada paciente (no solo el uso de productos farmacéuticos, sino también de estrategias ambientales) y los chequeos con el veterinario de cabecera.

El mensaje se basa en la medicina preventiva, la tenencia responsable y el control veterinario”.

¿Cómo creés que la tecnología puede colaborar tanto con la capacitación de los veterinarios? ¿Y en la difusión masiva de estos temas?

Creo que los cursos a distancia en plataformas virtuales, así como la transmisión de una conferencia en vivo (o en diferido) permite a muchos colegas que se encuentran en distintos puntos del país obtener una continua capacitación y actualización en los diferentes temas. Ha sido un gran avance para la profesión. Por otro lado, las redes sociales permiten difundir información concisa y concreta sobre algunos tópicos para la comunidad en general y de esa manera, generar conciencia y fomentar la tenencia responsable de las mascotas. Siempre esta información debe ser de fácil interpretación, que pueda llegar a todo público, sin olvidar que debe estar basada en fundamentos y evidencias científicas

¿De qué manera describirías tu rol actual como difusor / capacitador?

Mi objetivo es difundir a los colegas las diferentes problemáticas con respecto a las enfermedades transmitidas por vectores, que afectan a las mascotas y en algunas ocasiones, a las personas.
Siempre tengo dos metas: acercar todos los avances científicos en el tema sin olvidarme del consultorio, ni de la interacción con los pacientes. Es decir, dar herramientas para la clínica diaria basadas en la evidencia científica. La última data, tratando de aplicarla a la consulta de todos los días. Ese es mi gran desafío.

¿Te considerás ya un líder de opinión?

Me considero un veterinario con diferentes grados de formación académica, con experiencia en consultorio, generador de conocimientos (mediante la presentación y publicación de trabajos científicos) y que continuamente está estudiando. Esto permite que tenga la oportunidad de llegar a otros colegas y ayudar, de alguna manera, a sus pacientes.
He tenido (y sigo teniendo) muchos profesionales que me han formado y que me acompañan en este proceso. Solos nunca podemos, ya que el conocimiento se genera en comunidad, presentándolo, sociabilizándolo, desarrollándolo y confrontándolo con la realidad.

Hoy también es demanda de la sociedad que exige que sus mascotas accedan a una medicina de calidad. Lo noto día a día, con los pacientes que me derivan”.

¿Entendés que hay una cierta transformación en el sector en cuanto a un trabajo más colaborativo entre los veterinarios?

Es una gran alegría decir que eso está pasando.
Se está trabajando en equipo, entre los clínicos y los especialistas. Como todo, es un proceso pero que está avanzado. Esto trae como consecuencia llegar a diagnósticos y tratamientos cada vez más específicos para nuestros pacientes.
Hoy también es demanda de la sociedad que exige que sus mascotas accedan a una medicina de calidad. Esto lo noto en el día a día, con los pacientes que me derivan. Siempre trabajo con el clínico de cabecera y a veces, en conjunto con otros especialistas.
Y sinceramente es una manera excelente de trabajo ya que el paciente es acompañado de manera más integral y con excelentes resultados.

Carlos Catracchia es uno de los socios de Apsavet, empresa formada por veterinarios que ofrece una serie de planes integrales para implementar en los sistemas productivos.

Facundo Sonatti
facundo@motivar.com.ar

Carlos Catracchia, Santiago García, Lucía Llorente y Federico Bibiloni conforman el team que le dio origen a Apsavet, empresa formada por veterinarios y orientada a ofrecer un servicio integral a partir de planes que se adaptan a las necesidades de cada sistema productivo. Con el foco puesto en la industria lechera, son 35 los clientes que atienden de forma directa, pero esa cifra se multiplica por tres si se suman todos los asesoramiento en los que participan indirectamente a través de una beta educativa.

“Nuestros programas de capacitación son herramientas distintas al asesoramiento, pero orientadas a las mismas áreas de acción y lo que buscamos es certificar a las personas que trabajan en los establecimientos de que tienen los conocimientos y habilidades necesarias para realizar esos trabajos”, resume Catracchia otra de las facetas de Apsavet.

En diálogo con esta revista, el profesional oriundo de Carmen de Areco, Buenos Aires, confiesa que su paso formativo por la Facultad de Veterinaria de la UBA y, sobre todo, a partir de los trabajos grupales de esos ámbitos, despertó la necesidad de replicar esas experiencias en el plano laboral, creando una empresa conformada por veterinarios.

Team Apsavet tienen 35 clientes en el rubro lechero.

Entre las particularidades de Apsavet (www.apsavet.com.ar), se destaca que sus cuatro socios están repartidos por la Pampa Húmeda y no tienen oficina física (ni piensan tenerla). “Si bien hace años que trabajamos juntos, estamos en el camino de lograr esa transformación de ser solo veterinarios a empresarios”, reconoce Catracchia quien, en el siguiente mano a mano, repasa su visión de profesión, el futuro de la lechería y el rol del productor.

Revista 2+2: ¿Cómo surgió Apsavet?

Carlos Catracchia: Venía trabajando en producción lechera y se fueron sumando distintos pasantes como colaboradores. Juntos fuimos creciendo y nos fuimos especializando en distintas áreas. Todo esto, nos llevó a pensar que podíamos ofrecer un servicio integral. Hace más de tres años que trabajamos formalmente, pero las primeras acciones fueron hace seis. Nuestro campo de acción está enfocado en la salud, nutrición, producción y reproducción en rodeos lecheros, pero cada uno se especializa en una área particular. Además del trabajo de los cuatro socios de la compañía, nos integramos a otros profesionales en algunas actividades específicas.

¿Qué ventajas tiene pertenecer a una empresa de veterinarios?

La empresa ofrece una contención económica y el sentido de pertenencia a un grupo donde todos tienen los mismos beneficios, como ocurre en otros lugares. Hay que señalar que, para los veterinarios, en la actividad privada, una de las incógnitas es qué sucede cuando te lesionas o cómo organizas las vacaciones. Al ser parte de una empresa, esto lo tenemos resuelto. A su vez, estamos en un proceso donde nos sentimos cómodos con algunas cosas que fuimos logrando, como los planes integrales que ofrecemos, a los que les pusimos nombres y lo salimos a vender.

¿Cuáles son los servicios integrales que ofrecen hoy?

El producto estrella es SIAL Sistema Integral Lechero, a través del cual se busca la mejora continua a través de un programa con objetivos que se va desarrollando mediante distintas actividades; se evalúan resultados para luego, plantear nuevos desafíos. Esos conceptos los tomamos del plano empresarial con el fin de transformar la información en conocimiento. Mientras tanto, SIAC es el Sistema Integral de Crianza, orientado a carne, donde damos soluciones a la gestión de cría y engorde del ganado vacuno.

Sin embargo, últimamente, el área que más me ha divertido son los programas de capacitación que ofrecemos, en el cual hacemos la certificación de capacidades y habilidades donde uno interactúa con el personal para poder corroborar que pueden ejecutar el trabajo, desde que sepa leer hasta aplicar correctamente un antibiótico.

¿Qué papel juega la tecnología en la interacción con el personal?

En el medio del cambio generacional que está ocurriendo, hoy tenemos que buscar herramientas para comunicarnos de forma más fácil. En cinco años, buscamos que más del 50% de nuestro asesoramiento se concrete de forma online. Es por eso que siempre nos apalancamos de todas las tecnologías de comunicación que existen. No me gustan los estamentos fijos, sino la independencia y posibilidad de estar en varios lugares. Ese tipo de eficiencia es la que va a inundar a las empresas familiares en el campo. Algo que también llegará a los empleados.

¿Cuál es la respuesta de los productores ante su propuesta de planes integrales?

La respuesta de los clientes siempre es positiva porque resolvemos algo de lo que evidentemente había una demanda y nosotros podemos manejar de forma integral el sistema de producción. El programa tiende a adaptarse a cada productor porque incluso, en muchos de los establecimientos donde interactuamos, hay veterinarios trabajando. Es por eso que buscamos acoplarnos al programa de trabajo y eso lleva a que el productor no tenga múltiples especialistas de forma aislada, sino que se pueda coordinar todas las áreas más allá que el plan sea ejecutado por nosotros o no. Siempre tendemos a sumar trabajo nunca a restar.

¿Cuáles son los desafíos camino a convertirse en una empresa consolidada?

Algunos de los elementos que todavía debemos reforzar tiene que ver con sumar más profesionales e incluso salir del país. El nombre de la empresa debe ser una marca por encima de quienes la integren y un método de trabajo. Para eso hay que sumar más gente y siempre con la misma temática de tener el soporte de colegas. Somos cuatro socios y el resto de los colegas nos prestan servicios, pero eventualmente se pueden sumar a la compañía de forma definitiva y, de ese modo, pasarían a ser socios tanto en los riesgos como las ganancias.

¿Cuál es el futuro de la producción ante las nueva demandas de la sociedad?

Una parte de la sociedad está atenta a lo que ocurre con bienestar animal y eso nos permitirá mostrar lo bien que se trabaja en algunos establecimientos. Asimismo, la sustentabilidad de los sistemas es fundamental y habrá que trabajar cada vez mejor, algo que es muy positivo y de lo que nos tenemos que ocupar. Luego, hay lineamientos más extremistas, hay que entenderlos y en algunos casos hasta se les podrá dar una explicación, mientras que aquellos que no lo exijan, solo habrá que escuchar. Somos productores de alimentos y para eso hay que ser sustentables, tener personal capacitado, que esté cómodo con lo que hace, pueda progresar a partir de su trabajo y que, tanto las producciones de leche como de carne, tiendan a ser cada vez más eficientes.

Según un estudio realizado por el INTA y distintas universidades argentinas, más de un tercio de los veterinarios sufre accidentes al trasladarse de un lugar a otro por su trabajo.

De la Redacción vía
huertas.pablo@inta.gob.ar
htarabla@fcv.unl.edu.ar

En la Argentina, los veterinarios suelen recorrer grandes distancias para ejercer su profesión. En el caso de quienes se dedican a grandes animales, la necesidad de trasladarse para llegar a los distintos campos que asesoran hace que estén particularmente expuestos a sufrir accidentes viales.
En ese contexto, un grupo de investigadores compuesto por Pablo Huertas, Ana Molineri, Emilio León, Marcelo Signorini y Héctor Tarabla del INTA, CONICET y la Universidad Nacional de Tres de Febrero y la Universidad Nacional del Litoral, realizó un trabajo (financiado por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica), en el que se evaluó la frecuencia y los factores causales de accidentes laborales “in itinere (ALii)”.
Es decir, aquellos que se producen durante trayecto entre el domicilio del trabajador y el lugar de trabajo o viceversa. Entre sus principales conclusiones, se destaca que el 34,9% de los encuestados había tenido ALii en 31 partidos provinciales.
Entre las variables que mejor predicen la tasa de accidentes de tránsito en veterinarios se encuentran las actitudes ante el riesgo, el estrés y la agresividad. ¿Otro dato? El 56,8% de los entrevistados identificó más de un factor asociado al ALii, involucrando tanto a variables externas como a su propio comportamiento (Ver Tabla N°1).
Los interesados en acceder al documento completo pueden solicitarlo vía redaccion@motivar.com.ar, bajo el nombre “Accidentes Veterinarios”.

Atención con el trabajo “a campo”

Los objetivos del trabajo fueron estimar: a) la frecuencia de ALii, b) la existencia de factores asociados, c) la frecuencia y el tipo de lesiones resultantes y d) las pérdidas de días laborales en veterinarios de grandes animales de Buenos Aires.
Para cumplirlos, se desarrolló un estudio observacional transversal en 106 profesionales, utilizando un muestreo aleatorio simple.
Los entrevistados tenían entre 34 y 56 años y entre 8 y 32 años de antigüedad profesional, mientras que el 90,6% eran del sexo masculino.
Seis de cada diez profesionales atendían una única especie; 28,3% dos especies y los restantes tres o más especies.
El 91,5% se dedicaba a bovinos, pudiendo también trabajar con equinos (33%), pequeños animales (16%), porcinos (9,4%), ovinos (3,8%) o aves de corral (0,9%). Los medios de transporte utilizados para el trabajo fueron vehículos utilitarios / camionetas (69,8%) o automóviles (30,2%) recorriendo 44.886,8±24.628,0 km/año.
La práctica con grandes animales exige transitar mayores distancias que otras actividades veterinarias, que en Argentina pueden superar largamente los 100.000 km/año.
En este trabajo, los encuestados recorrieron un mínimo de 6.000 y un máximo 120.000 km/ año para cumplir con sus labores profesionales.

Tabla N° 1. Factores asociados con la ocurrencia de accidentes in itinere en veterinarios de grandes animales de Buenos Aires.
Factor Frecuencia (%)
Estado psicofísico (cansancio, estrés, sueño) 29,7
Otros conductores 29,7
Estado e infraestructura de los caminos 27,0
Condiciones climáticas 21,6
Propia conducción 18,9
Cumpliemiento de horarios 18,9
Animales sueltos 16,2
Otras 8,1

Las causas de los accidentes

Entre las variables que mejor predicen la tasa de accidentes de tránsito en veterinarios se encuentran las actitudes ante el riesgo, el estrés y la agresividad.
Aunque en nuestro país los ALii en veterinarios son más frecuentes en caminos rurales, el uso habitual de elementos de seguridad y la percepción del riesgo de accidentes viales en estos profesionales son más altos para el tránsito en rutas. En este trabajo, el 34,9% de los profesionales había sufrido ALii (caminos rurales 16,0%, rutas 12,3% y áreas urbanas 6,6%).
Esta frecuencia está influenciada por numerosos factores tales como la fuente de datos analizada, el tipo de práctica profesional, el país y la región bajo estudio.

¿Cómo se previene?

Las buenas prácticas durante el tránsito in itinere deben acatar simplemente las normas legales de seguridad vigentes y priorizar un manejo defensivo. En muchas regiones, el tránsito vehicular en caminos rurales genera mucho polvo que queda flotando en el ambiente por lo que, aunque no sea obligatorio, es aconsejable encender la luz baja durante el día.
No obstante, un número variable de conductores incumplió con normas básicas, tanto en lo referente al uso de elementos de protección activos (alumbrado) y pasivos (cinturón de seguridad) del vehículo automotor, como de comportamiento individual al volante.
Quienes hablaban por celular mientras conducían eran significativamente más jóvenes que quienes nunca lo hacían.
Por otra parte, cinco profesionales admitieron el consumo ocasional de bebidas alcohólicas antes de conducir.
Desde hace muchos años existen claras evidencias que involucran al consumo de alcohol como un factor de riesgo excepcionalmente importante para los accidentes automovilísticos, especialmente los accidentes de un solo vehículo. Sin embargo, en un reciente trabajo realizado en una región colombiana, el 15,3% de los veterinarios encuestados consumía bebidas alcohólicas antes y durante el trabajo, pero sólo 2,4% lo consideró un riesgo para la práctica profesional.
“Los hábitos del profesional en el tránsito in itinere con su vehículo de trabajo no necesariamente reflejan su comportamiento cuando conduce junto a su familia o en otras actividades”, se destaca en el trabajo realizado.
Y concluye: “Sin embargo, los resultados muestran que los riesgos ocupacionales en Medicina Veterinaria no se relacionan solamente con los peligros biológicos, sino que incluyen otros orígenes que aumentan la probabilidad de accidentes in labore e in itinere.
Un cambio de actitud entre los profesionales parece ser la condición primaria para lograr avances, pero sería de suma utilidad que los programas de educación continua incluyeran todos los peligros a los cuales se ven enfrentados estos profesionales.

El lucro cesante, un fantasma que persigue a los profesionales veterinarios

Según el estudio realizado por profesionales del INTA, CONICET y distintas universidades de nuestro país, el 70,3% de los accidentados solo sufrió consecuencias limitadas y daños materiales en el vehículo automotor.
El porcentaje de quienes sufrieron lesiones no es considerable, e incluyeron contusiones y hematomas (21,6%), heridas cortantes (10,8%), fracturas (10,8%), luxación (2,7%) y una lesión en tobillo (incapacidad del 65%).
Sin embargo, los accidentes laborales en tránsito causan con mayor frecuencia lesiones severas con convalecencias más prolongadas que los accidentes en el trabajo. Dado que muchos profesionales no cuentan con seguros laborales, al daño físico se debe agregar el lucro cesante producido.
Si tenemos en cuenta que el 78,3% trabajaba de forma autónoma, el riesgo se acrecienta. En este sentido, un seguro de trabajo es clave para la seguridad física y económica de los profesionales veterinarios.