Nuevo Centro de Rehabilitación para perros y gatos en Buenos Aires
El emprendimiento de la MV. Sol Pereyra Rozas está en la Ciudad de Buenos Aires, y cuenta con toda una gama de terapias y técnicas para el bienestar y confort de las mascotas.
La MV. Sol Pereyra Rozas inauguró a principios de enero su nuevo Centro de Rehabilitación Veterinaria en la Ciudad de Buenos Aires, con toda una gama de terapias y técnicas para el bienestar de nuestras mascotas.
La profesional contó a Mi Negocio Veterinario qué servicios ofrece y cómo fue el camino para lograr instalar un emprendimiento de estas características en medio de un entorno político-económico adverso para su desarrollo en Argentina, confirmando que, con una buena planificación y un enfoque claro, las buenas ideas se hacen realidad.
“En el centro de rehabilitación veterinaria trabajamos con perros y gatos. Tenemos diferentes equipamientos como la caminadora subacuática para ser hidroterapia, la caminadora seca para hacer kinesiología y ejercicios, y todos los equipos para hacer fisioterapia, como campos magnéticos, láser tipo 4, electroanalgesia, electroestimulación y además trabajamos con todas las técnicas de masajes”, detalló la profesional.
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En ese sentido, explicó que la fisioterapia o rehabilitación “es complementaria a la neurología para pacientes con lesiones medulares, por ejemplo, a la traumatología para aquellos pacientes que hayan tenido algún trauma, algún accidente o alguna cirugía correctiva; y siempre también con la clínica, ya que hacemos muchísimo manejo del dolor”.
Sol destacó que este proyecto de negocio “llevó mucha planificación. Tuve un gran arquitecto que entendió la idea de lo que se necesitaba para que los pacientes estén cómodos y que no se molesten entre ellos, y a la vez que los tutores estén en un espacio confortable”.
Contra viento y marea
La profesional entendió que el momento en el que decidió emprender fue cuanto menos “complicado”, debido a que “nos agarró justo el cambio de gobierno en Argentina, no había precios ni abastecimiento de materiales”, dijo, en alusión a las consecuencias de la inflación y la cotización al alza del tipo de cambio, entre otros fenómenos de impacto económico.
De allí que “uno siente que en el momento tiene que frenar todo, pero ahí seguís emprendiendo y bueno, se hizo realidad el 3 de enero de este año”, concluyó.
