“La industria va a seguir creciendo en todos sus rubros”
Harold Benavides, gerente de la clínica Dover en Bogotá y director comercial del Congreso Cartagena Business, analiza la actualidad del rubro en su país.
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La industria seguirá con una tasa de crecimiento favorable en los próximos años, que va a permitir la expansión de todos los involucrados: las empresas de nutrición, los laboratorios, los prestadores de servicios, las tiendas de retail, todos”. Con estas palabras contextualiza Harold Benavides, gerente de la clínica veterinaria Dover (una de las más grandes de Colombia), la actualidad del sector de animales de compañía en su país, en un diálogo que próximamente estará disponible en Podcast.
Según este profesional en finanzas y relaciones internacionales que hace algunos años se sumó a la empresa familiar fundada por su padre en 1955 y que sigue radicada en Bogotá, el crecimiento del rubro se ve, por ejemplo, en la fuerte presencia y aumento de tenencia de gatos en los hogares colombianos.
Según Benavides solo existe un 5% de clínicas en Bogotá dedicadas exclusivamente a atender medicina felina. Esto deja un espectro bastante amplio en el que trabajar.
“La oferta de productos, de concentrados, de accesorios, inclusive, algún tipo de medicamentos enfocados solamente hacia los felinos ya está disponible y cada día va a tener más desarrollo. Luego, desde la parte de la prestación del servicio y la disponibilidad de productos, hay forma de empezar a atender esa demanda, cada vez más creciente, de estos dueños de mascotas felinos”, indicó.
Perfil de las clínicas veterinarias en Colombia
Según Benavides más del 85% de los negocios no superan los 20 empleados y aún hay un alto grado de informalidad. “Si bien esto tiende a ser alto, cada vez hay más conciencia sobre la necesidad de formalizar las empresas desde lo comercial, lo laboral y lo contable”, sostuvo nuestro entrevistado.
Asimismo, indicó que los negocios veterinarios en Colombia suelen estar gerenciados por una pareja en la que uno es veterinario y el otro se dedica a la gestión.
El perfil profesional de quien se dedica a la parte administrativa puede variar “inclusive carreras que no son afines a la gestión empresarial pero que han visto la necesidad de que alguien del grupo familiar se dedique al tema de gestión y el otro se dedique al tema técnico”, indicó.
Con Bogotá, Cali y Medellín a la cabeza de las ciudades colombianas con mayor impacto en la industria de las mascotas, vale graficar el valor de las consultas generales, como de los especialistas. Según Benavides, una consulta especializada podría estar entre los US$ 50 a US$ 60; mientras que para una consulta general se necesitarían entre US$ 35 y US$ 40. Aun así, pueden encontrarse precios hasta un 50% más bajos en determinadas regiones.
Finalmente, Benavides compartió su visión sobre la problemática por la cual, en la práctica, los MV hacen un esfuerzo en llevar adelante su emprendimiento, pero escasos de información no consiguen superar las barreras.
“El fracaso de los negocios en medicina veterinaria no es porque los veterinarios hagan mal la medicina, es porque no saben manejar el centro y esto implica poder cobrar bien por los servicios. El tiempo del veterinario vale, los insumos que utiliza valen; el equipamiento vale y todo eso tiene que ser cubierto por alguien. Entonces cuando el veterinario presta los servicios y nadie le paga, es donde empieza el problema», completó el referente.
Tendencias
«Hemos visto que al mercado han llegado unos jugadores importantes, sobre todo, aunque no exclusivamente, en lo que tiene que ver con grandes cadenas de pet shops, con estructuras muy corporativas, muy organizados”, nos decía Harold. Y agregaba: “Son empresas que tienen 25 o 30 puntos de venta, muy robustas, que para el veterinario que tiene una pequeña tienda de barrio, un pequeño petshop, pues van a implicar unos retos de competitividad muy agresivos».
Esta situación se repite también en clínicas veterinarias dónde han entrado al mercado colombiano empresas internacionales de gran envergadura. Esto es un reto que empuja al mercado a mejorar.
«En el tema de clínicas veterinarias, también hemos visto el ingreso de jugadores importantes, movimientos de consolidación, de alianzas entre veterinarias y tiendas de mascotas que son benéficos para la industria, porque lo que hacen es elevar el estándar de servicio. Esto va a permitir generar mejores condiciones laborales y mejor servicio para incluso mejorar el prestigio de ser veterinario», aseguró Benavides.
Es entonces un reto competitivo muy fuerte que deberán asumir con diligencia los dueños de negocios veterinarios en Colombia. Según Benavides, el cambio se sentirá a partir del inicio del año 2024. Esta es una de las razones por las cuales los emprendimientos veterinarios deben prestar más atención a la gestión.
Falta de herramientas de gestión, un problema que se repite en la región
Es claro ya que desde las facultades de Veterinaria existe una falencia en cuanto al tratamiento de temas de gestión. Los alumnos no consiguen en los currículos materias que les permitan profundizar en temas administrativos.
“Es muy poco lo que se habla de emprendimiento, de manejo empresarial, de inteligencia financiera, digamos que estas áreas brillan por su ausencia en todos los currículums universitarios”, nos decía Harold Benavides.
Sobre la Clínica Dover
La clínica Dover está ubicada en Bogotá, Colombia. Es una empresa familiar, fundada en 1955. Hijos y nietos del fundador hacen parte hoy de la veterinaria y es Harold Benavides quien se encarga del tema de la gestión.
Cuenta con un equipo de trabajo de más de 95 profesionales, de los cuales el 77% son mujeres ubicadas en todos los frentes del negocio. Además, cuentan con un grupo de 15 pasantes universitarios que culminan sus estudios en la veterinaria.
Este año acaban de abrir un nuevo hospital en Bogotá, donde derivan el servicio de oncología, neurología, servicios de laboratorio, radiología, cirugía, pet shop y belleza.