¿Pagás de alquiler más del 15% de lo que factura tu veterinaria?
Si esto ocurre, el problema es grave. El primer paso para solucionarlo es sacar cuentas y saber en qué situación estás. ¿Lo hiciste?
El costo del alquiler es uno de los aspectos cruciales en la gestión financiera de una veterinaria de pequeños animales en distintos lugares del mundo, pero fundamentalmente en la Argentina de los últimos tiempos.
La participación ideal de este gasto fijo sobre el total de la facturación de una clínica veterinaria obviamente puede variar según ubicación geográfica, el tamaño del local y la estructura de costos específica de cada negocio, por ejemplo. Sin embargo, en general se considera que el costo del alquiler no debe superar el 10% al 15% de la facturación total para garantizar una rentabilidad sostenible y equilibrada.
¿Y en tu veterinaria? ¿Cuánto representa el pago del alquiler sobre el total de los ingresos? ¿Es un indicador que tienen en cuenta?
Sabiendo lo que es ser inquilinos y conociendo las condiciones actuales de contratos, tomamos coraje e igualmente insistimos en recordar la importancia de no bajar los brazos de antemano e intentar negociar los valores del contrato.
Esto parece utópico, pero en momentos de crisis económica, es fundamental hacer un intento. Esto puede implicar buscar descuentos temporales, ajustes en los términos de pago o incluso considerar la posibilidad de reubicarse en un espacio más económico si es viable.
¿Qué más se puede hacer?
- Optimizar el uso del espacio: Es importante aprovechar al máximo el espacio disponible en la veterinaria. Esto incluye optimizar la disposición de equipos y mobiliario para una mayor eficiencia operativa, así como evaluar la posibilidad de compartir el espacio con otros servicios relacionados para reducir costos fijos.
- Diversificar fuentes de ingresos: Hacerlo puede ser clave para mantener la estabilidad financiera. Los dueños de veterinarias pueden considerar ofrecer servicios adicionales, como venta de productos especializados o incluso consultas a domicilio, para ampliar su base de clientes y aumentar los ingresos.
Además de estas recomendaciones y de saber que no son sencillas de poner en práctica, es fundamental insistir en que en momentos como los actuales es imprescindible mantener una gestión financiera rigurosa, controlando los gastos operativos, negociando con proveedores y buscando constantemente oportunidades de mejora en la eficiencia y la rentabilidad del negocio.
